Transformaciones territoriales en torno a la declaratoria de Paisaje Cultural (Quebrada de Humahuaca).

CLARA MANCINI; CONSTANZA TOMMEI

Cordoba

Encuentro; XVIII ENCUENTRO DE GEOGRAFIAS DE AMERICA LATINA; 2021

Universidad Nacional de Cordoba

La Quebrada de Humahuaca ha sido reconocida como Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad por UNESCO en el año 2003. A su vez, la Quebrada se ha posicionado entre los principales destinos turísticos de la Argentina. La vinculación patrimonio y turismo trae aparejadas diversas transformaciones en el territorio. En el caso de la Quebrada de Humahuaca estos cambios se vinculan a una reestructuración del capitalismo a partir de la crisis del neoliberalismo de los años 1990 y la reconversión de la matriz productiva con un estímulo desde las políticas públicas puesto en el perfil turístico de la región. El territorio está inmerso en relaciones de dominación o apropiación del espacio, desde la dominación política económica hasta la apropiación más subjetiva o cultural simbólica. La territorialización se da cuando el espacio se convierte en territorio a través de estos procesos. La patrimonialización se inicia cuando se selecciona algún elemento o evento para darle valor -que se supone compartido-. La turistificación remite al proceso de producción de un lugar turístico a partir de prácticas materiales -acondicionamiento del lugar para recibir visitantes- y simbólicas -representaciones sobre el destino-. El turismo, considerado recurso económico, y el patrimonio, que otorga valoración simbólica, se reconstruyen mutuamente, el primero otorga legitimidad a los sitios patrimoniales, al tiempo que mercantiliza y, paradójicamente, pone en riesgo el patrimonio a preservar y a los habitantes de ese territorio. A más de 15 años de la declaratoria de UNESCO, las disputas en torno al patrimonio y el territorio en la Quebrada de Humahuaca generaron consecuencias muy dispares. Los cambios en el territorio en estudio tuvieron fuertes efectos sobre el espacio físico, como sobre las representaciones de ese espacio social. Se han señalado, por un lado, procesos de precarización territorial -expulsión de la población local que muchas veces se define como desterritorialización, especulación inmobiliaria, fragmentación, sobreexplotación por el turismo, degradación del paisaje-, en el otro extremo, se observó un fortalecimiento de la identidad local, reconocimientos oficiales de comunidades originarias, otorgamiento de tierras y viviendas. Esta descripción de los procesos de transformación territorial en la Quebrada de Humahuaca suele apoyarse en análisis de los principales centros de atracción del turismo. Sin embargo, la Quebrada es un territorio mucho más amplio y dispar que recibe inequitativamente inversiones, proyectos y el impacto del turismo. El turismo a partir de la década de 1990 se concentró en unos pocos lugares, y esto trajo consecuencias dispares en el paisaje. De hecho, los únicos pueblos que concentran la mayor parte de la infraestructura hotelera son Purmamarca, Tilcara y Humahuaca. Según la Dirección Provincial de estadísticas y Censos (DIPEC), entre estas localidades se concentra poco más del 50% de los alojamientos de toda la provincia de Jujuy. El resto de las localidades de la Quebrada, representan sólo el 5 % de alojamientos de la provincia. En este sentido, proponemos en este trabajo observar comparativamente las transformaciones territoriales en torno a la turistificación y patrimonialización en algunos casos que representan estos centros turísticos del Paisaje Cultural con otros pueblos que quedaron más marginados de la llegada del turismo. Para ello, analizamos los procesos de transformación territorial de Purmamarca y Tumbaya (ambos del departamento de Tumbaya), y Tilcara y Huacalera (que pertenecen al departamento de Tilcara).Entre los ejes metodológicos, se propone un análisis gráfico, con dibujo y redibujo intencionado y cartografías interpretativas de imágenes satelitales y otras fuentes, buscando indicios de las transformaciones urbanas de estos centros, como medio de conocimiento y como forma de expresión, que permite entender el territorio y hacer visibles los procesos de cambio. Asimismo, se plantea un trabajo in situ, para conocer los principales cambios en los poblados seleccionados, se trata de relevar y dibujar el territorio, enriqueciendo este análisis con una recomposición y lectura de las fuentes disponibles. Otro eje propuesto, es el análisis geoespacial de los datos que proveen los organismos oficiales de gobierno sobre patrimonio, turismo y el contexto socioeconómico de estos lugares. Además, para completar esta investigación se realizó trabajo de campo con observación participante.De este modo, el estudio del impacto físico del turismo (en infraestructura pública y privada) así como las transformaciones socioculturales nos permiten comprender cómo la definición del Paisaje Cultural reestructura el territorio. A nivel comparativo, observamos cómo en este proceso de transformaciones la competencia y la fertilidad territorial entre sectores y localidades de la Quebrada generaron una nueva forma de estructuración del territorio, fracturas internas al territorio, que, aunque se apoyan en las tendencias preexistentes, cobran una dimensión nueva y surgen nuevas escalas en el territorio.