Urbanización de villas en contextos de renovación. ¿Justicia espacial o especulación inmobiliaria?

ANA LAURA AZPARREN

Buenos Aires

Jornada; II Jornadas Interdisciplinarias (In)Justicias espaciales en Argentina y en América Latina; 2017

Centro Cultural de la Cooperación

Desde la asunción de Horacio Rodríguez Larreta (PRO) al frente del Poder Ejecutivo de la Ciudad de Buenos Aires en diciembre de 2015, las políticas públicas hacia las villas sufrieron importantes modificaciones. Mientras que en los 8 años de gestión macrista en la Ciudad las políticas destinadas a estos barrios se caracterizaron por la fragmentación, la regresividad presupuestaria y la adopción de políticas transitorias (Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia, 2016), desde la asunción de Larreta se propuso la integración socio-urbana de algunas villas, y se aprobaron leyes para tal fin. En efecto, entre noviembre de 2016 y marzo de 2017 se aprobaron en la Legislatura porteña las leyes de urbanización de villa 20 (N° 5705), de Playón de Chacarita (N° 5799) y del barrio Rodrigo Bueno (N° 5798); y se creó la Secretaría de Integración Social y Urbana para las villas 31 y 31 bis (Retiro).Los procesos de urbanización de estos barrios se encuentran vinculados con la existencia de grandes proyectos urbanos en las zonas aledañas: la Villa Olímpica para los Juegos de la Juventud (a realizarse en 2018) en el caso de villa 20; la apertura de la Avenida Triunvirato y la construcción de edificios de vivienda para sectores medios en las proximidades del Playón de Chacarita; el proyecto Solares de Santa María de la constructora IRSA S. A. en la ex ciudad deportiva de Boca Juniors, al lado del barrio Rodrigo Bueno; y el Paseo del Bajo y la modificación del trazado de la Autopista Illia en el caso de las villas 31 y 31 bis.Esta co-existencia entre procesos de renovación urbana vinculados a grandes negocios inmobiliarios, y proyectos de re-urbanización de las villas que están en sus proximidades, nos conduce a preguntarnos si la urbanización de villas en estos contextos tiende a generar una mayor justicia espacial o, por el contrario, conduce a incrementar los procesos de especulación inmobiliaria. Para responder a dicha pregunta, analizamos el caso de Rodrigo Bueno, y el proceso de debate que concluyó con la aprobación de la ley de Integración socio-urbana de este barrio.