Tras los rastros de poesía en la experiencia y en el paisaje. Allí donde lo poético emerge como espacio para las memorias subalternas.

RASIC MARÍA EUGENIA

Seminario; XIII SEMINARIO INTERNACIONAL POLITICAS DE LA MEMORIA. Memoria y Derechos Humanos; 2022

“De qué lado nos encontramos/ cuando usamos las palabras que limitaron el desierto”nos dice en versos Christian Aedo, uno de los poetas que participó en Prueba desoledad en el paisaje (Mansalva, 2011), un poemario escrito en una antigua escuelarural de Quiñihual, Partido de Coronel Suárez (Buenos Aires), recuperada como espaciode residencia para escritores por el proyecto cultural colectivo Estación Pringles. Enotro pueblo del mismo Partido, Cura Malal, sobre una de las mesas de madera queforma parte del espacio de arte y pulpería “La tranca”, nos encontramos escrito: “Nopertenecer a algo duradero es la peor de las agonías”. Allí, el proyecto poéticodocumental colectivo Proyecto Hermosura se hace eco de estas resonancias orales yrecupera poesía y memoria de formas no exclusivamente escritas o librarias. De la manode ambos proyectos, indagaré, además, en la noción de lo poético como un espacio decreación colectiva que emerge en el paisaje bonaerense y deja ver, a su vez, tanto lashuellas que las campañas históricas de desertificación nacional dejaron allí grabadas(incluso en el “vacío” y en el fuerte despaisamiento), como las experiencias de vidacomunitaria que aún continúan latentes.