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En la planificación del transporte público existe la necesidad de obtener evaluaciones rápidas de la demanda de viajes, pero lo suficientemente ajustadas para una primera respuesta ante posibles actuaciones en nuevas líneas o estaciones. En este sentido, desde el Consorcio Regional de Transportes de la Comunidad de Madrid, y con fines prácticos en el trabajo habitual que desarrolla, se impulsó en colaboración con el Departamento de Geografía Humana de la Universidad Complutense el desarrollo de una metodología simple y de respuesta rápida con el propósito de estimar las entradas de viajeros en las estaciones de la red de metro. Se trata de un modelo de regresión lineal múltiple, apoyado en un SIG, que incorpora variables relativas a las características de cada estación y su entorno (población, empleo, mezcla de usos, diseño urbano, presencia de modos alimentadores, etc.). Para calcular cada una de las variables de los entornos de las estaciones se han obtenido franjas de cobertura a través de la red (que se ajustan mejor a la realidad que los habituales radios de distancia en línea recta). El modelo propuesto tiene en cuenta el hecho de que existe una tendencia a utilizar menos el metro a medida que aumenta la distancia a las estaciones (distance decay).Para ello, se ha analizado la relación existente entre la distancia a las estaciones y el número de viajeros entrados a pie en las mismas, lo que ha permitido construir curvas de caída de la demanda. Los resultados de las curvas han sido utilizados para ponderar las variables introducidas en el modelo, de manera que los datos de las franjas más próximas pesan más que los de las franjas más lejanas. El resultado es un modelo sencillo, de respuesta rápida, cuya aplicación presenta resultados alentadores y que se plantea como una alternativa o complemento al modelo de cuatro etapas, más complejo y con un mayor coste económico.

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