Eficiencia de uso de nitrógeno en dos variedades de trigo en función del momento de aplicación y dosis

• MARTÍN F. IALEA, PABLO A. BARBIERI, HERNÁN E. ECHEVERRÍA, HERNÁN R. SAINZ ROZAS

paraná, Entre Rios

Congreso; XIX Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo; 2004

AACS

El conocimiento de la eficiencia con que el cultivo de trigo utiliza el nitrógeno (N) del fertilizante es un aspecto relevante para mejorar el aprovechamiento de este recurso y disminuir el riesgo de contaminación. La eficiencia de recuperación (ER) de N del fertilizante suele ser baja debido a los procesos de pérdida que sufre este nutriente en el suelo. La ER puede variar en función del momento de fertilización, pero los trabajos realizados hasta el momento muestran resultados contradictorios. En la campaña 2002 se realizaron ensayos con las variedades Buck Sureño (BS) y Baguette 10 (B10) en Otamendi, Tandil y Balcarce Se utilizó un diseño en bloques completos aleatorizados con tres repeticiones con un arreglo factorial 3 x 2 de los tratamientos, esto es, 3 dosis de N (Testigo, 100, 150 y 200 kg N ha-1) y 2 momentos de aplicación: a la siembra y al macollaje. La fertilización al macollaje se realizó en el estadío de doble arruga. Se cosechó en madurez fisiológica y se calculó la eficiencia de recuperación de N del fertilizante (ER = (kg N absorbido del tratamiento fertilizado - testigo) / kg de fertilizante aplicado). En BS, la aplicación de N al macollaje incrementó el rendimiento del trigo respecto de la aplicación al momento de la siembra (4779 vs 4501 kg ha-1), y el mismo comportamiento fue observado en B10 (5829 vs 5458 kg ha-1), promedio de dosis de N y sitios. En BS, la aplicación de N al macollaje incrementó el N acumulado por el cultivo respecto de la aplicación al momento de la siembra (143 vs 128 kg ha-1), y el mismo comportamiento fue observado en B10 (160 vs 140 kg ha-1), promedio de dosis de N y sitios. El mayor N acumulado en biomasa aérea para las aplicaciones de N al macollaje determinó una mayor ER respecto de las aplicaciones de N al momento de la siembra. En BS, la ER fue de 0,48 y 0,61  para la aplicación a la siembra y al macollaje, respectivamente. En B10, la ER fue de 0,50 y 0,67 para la aplicación a la siembra y al macollaje, respectivamente. Los resultados de este experimento muestran que en zonas o años con excesos hídricos al comienzo de la estación de crecimiento del trigo, la aplicación de N al macollaje aumenta la ER por una mejor sincronización entre la oferta del nutriente y la demanda del cultivo.