Respuesta del cultivo de maíz bajo siembra directa al método de aplicación de nitrógeno

• PABLO A. BARBIERI, HERNÁN E ECHEVERRÍA, HERNÁN R SAINZ ROZAS

Puerto Madryn, Chubut

Congreso; XVIII Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo; 2002

AACS

La fertilización nitrogenada es una práctica frecuente en siembra directa (SD). Sin embargo, si fertilizantes amoniacales como la urea son aplicados en superficie, las pérdidas por volatilización podrían disminuir la disponibilidad de nitrógeno (N) para el cultivo. Se realizó un experimento en la EEA-INTA Balcarce durante 1998/99 y 1999/00. En la primer campaña, los tratamientos fueron:1) Testigo sin aplicación de N, 2) Urea (46-0-0) en superficie, 3) CAN (nitrato de amonio calcáreo, 27-0-0) y 4) Urea incorporada. En la segunda campaña se evaluaron los mismos tratamientos a excepción del CAN. La dosis de N fue de 70 kg ha-1 aplicada en V6. Las pérdidas por volatilización se determinaron mediante un sistema adaptado del propuesto por Nommik (1973). En floración, se evalúo el contenido de clorofila, materia seca y el rendimiento en madurez fisiológica. En ambos años, las pérdidas por volatilización desde Urea en superficie no superaron el 7% del N aplicado, lo que podría deberse a la elevada capacidad buffer de estos suelos. Cuando la urea fue incorporada, las pérdidas fueron inferiores al 0,1% del N aplicado. En ambos años, se determinó una elevada respuesta al agregado de N. La urea aplicada debajo de los rastrojos generó la mejor condición de nutrición nitrogenada, esto se relacionó con las menores pérdidas de N por volatilización. No obstante, las diferencias en rendimiento en grano obtenidas con la aplicación superficial, no son de gran magnitud, lo que podría ser debido a que las pérdidas por volatilización fueron bajas en este último tratamiento.