INVESTIGADORES
BARBIERI Pablo Andres
congresos y reuniones científicas
Título:
Fertilización con cinc y cobre en trigo en un Argiudol de Balcarce con prolongada historia agrícola
Autor/es:
PABLO A. BARBIERI; ECHEVERRIA HERNAN; HERNÁN R SAINZ ROZAS; JUAN PABLO MARTINEZ; JOSE LUIS VELAZCO; NAHUEL REUSSI CALVO
Lugar:
Bahia Blanca
Reunión:
Congreso; XXIV Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo. II Reunión Nacional ?Materia Orgánica y Sustancias Húmicas; 2014
Institución organizadora:
Asociacion Argentina Ciencia del Suelo
Resumen:
Los nutrientes comunmente aplicados al trigo en el sudeste bonaerense son nitrógeno (N), fósforo (P) y en algunas situaciones azufre (S). Sin embargo, los micronutrientes (cinc, Zn, y cobre, Cu) no son repuestos lo que podría afectar su rendimiento, en suelos con prolongada historia agrícola. El objetivo del trabajo fue evaluar la respuesta de trigo a la aplicación de NPS y NPS + Zn + Cu, bajo dos sistemas de labranza (labranza convencional, LC y siembra directa, SD). La experiencia se realizó en 2003 y 2010 en la EEA-INTA sobre un ensayo de larga duración iniciado en el año 2001. En ambos años, la fertilización con Zn y Cu no incrementó significativamente el rendimiento (5097 kg ha-1 NPS vs 4732 kg ha-1 NPS + Zn + Cu en 2003 y 6502 kg ha-1 NPS vs 6379 kg ha-1 NPS+ Zn + Cu en 2010), ni en el contenido de proteína en grano (12,2% NPS vs 12,1 % NPS + Zn + Cu, en 2003 y 12,7% NPS vs 12,8% NPS + Zn + Cu, en 2010). Similar comportamiento se observó para el sistema de labranza en rendimiento (4965 kg ha-1 LC vs 4733 kg ha-1 SD en 2003, y 6134 kg ha-1 LC vs 5677 kg ha-1 SD, en 2010) y contenido de proteína en grano (11,8% LC vs 11,5% SD, en 2003 y 12,7% LC vs 12,0% SD, en 2010). La falta de respuesta a Zn y Cu sería debido a la adecuada disponibilidad del suelo de dichos micronutrientes (1,1 y 1,6 mg kg-1 promedio de ambos años, para Zn y Cu, respectivamente), aún en lotes con prolongada historia agrícola y con una secuencia de 4 cultivos en 3 años, durante los últimos 11 años. Estos resultados indican que si bien los niveles de materia orgánica del suelo han disminuido notablemente en las últimas décadas, la capacidad de proveer Zn y Cu es suficiente para satisfacer las necesidades del cultivo de trigo.