INVESTIGADORES
SCHNYDER Maria Celeste
congresos y reuniones científicas
Título:
Construyendo un nuevo enfoque sobre el autoritarismo sub-nacional a la luz de la violencia institucional. El juarismo en Santiago del Estero.
Autor/es:
CELESTE SCHNYDER
Lugar:
Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales
Reunión:
Jornada; 3º Jornadas de Intercambio de Producción Científica; 2010
Institución organizadora:
Facultad de Ciencia Política y RRII. UNR
Resumen:
El caso del juarismo desafía los marcos interpretativos desde los cuales se ha pensado el tema del autoritarismo y su relación con el régimen democrático. En primer lugar, porque las teorías de las democratizaciones en la región han soslayado la dimensión territorial de dicho proceso. De acuerdo a Gibson (2005), dichas teorías asentadas en una visión de la nación como un todo, no ha tenido en cuenta la existencia de actores organizados a nivel regional y que establecen diferentes relaciones con otros niveles de gobierno. En ese sentido, Del Pino y Jelin (2003) han señalado que el escenario de la acción (la comunidad, la nación o la región) no debe ser visto como un “dato” o algo preexistente. Existe un proceso histórico de constitución de “territorialidades sentidas” en el que cuenta especialmente las experiencias compartidas: historias, rituales y mitos. “Se trata de ver al «lugar» como manifestación de la experiencia y del sentido, conectado con unas prácticas sociales” (2003:3). En segundo lugar, Da Silva Catela ha señalado que existe una configuración desigual de la percepción de la violación a los derechos humanos como problema social y, agregamos, político entre las regiones del país. En la coyuntura de la “transición a la democracia” se forjó una especie de memoria oficial a partir de la experiencia sufrida en las grandes ciudades urbanas del país entre 1976 y 1983 que invisibilizó las particularidades que asumieron los procesos represivos en las provincias, con sus actores, organizaciones, modalidades y temporalidades específicas, heterogéneas entre sí, que no fueron desactivados por igual en los territorios provinciales con la recuperación democrática. En tercer lugar, la situación se complejiza aún más si ampliamos nuestra mirada a la relación que, en el registro de las ciencias sociales y en el discurso político, se ha establecido entre Autoritarismo y Democracia. A partir de 1983 los gobiernos autoritarios han quedado identificados con la dictadura militar y la violencia ha sido equivalenciada con los crímenes del terrorismo de estado y la lucha guerrillera, su sentido anudado a la violación de los derechos humanos. Desde esta perspectiva, el autoritarismo forma parte de lo que se llamó “pasado reciente” que se diferenciaría de un presente considerado fundacional. Ambos términos comenzaron a designar temporalidades, actores, prácticas específicas y excluyentes entre sí. Como ha advertido Lesgart (2006), si bien la dicotomía autoritarismo vs democracia como eje ordenador de la discusión académica y política, ha sido eficaz para establecer las diferencias entre regímenes, instalar socialmente nuevas representaciones de la política distantes a las que habían primado en el pasado así como para caracterizar actores, la misma ha terminado por reducir la complejidad del mundo político. ¿Hasta qué punto podemos seguir afirmando que autoritarismo y democracia constituyen categorías excluyentes entre sí? ¿O que el uso político de la violencia es un rasgo exclusivo de los regímenes militares?. Esta dicotomía necesita entonces ser repensado para el estudio de ciertos casos referidos a la política sub-nacional, como Santiago del Estero durante el juarismo, en donde los límites entre la institucionalidad y la ilegalidad se tornan porosos configurando, más que la expresión de “reglas informales”, una “zona gris” (Auyero, 2007). Proponemos introducir al análisis nuevas variables que, el énfasis en el estudio de las instituciones formales, ha dejado en segundo plano: cómo se pueden construir diversas formas de dominación política que trascienden y exceden a las instituciones y reglas formales de la democracia política y que tiene en los usos políticos de la violencia como uno de sus elementos.