INVESTIGADORES
CASAS Matias Emiliano
congresos y reuniones científicas
Título:
La revista México Charro. Deporte, cultura y nacionalismo en la invención de una tradición mexicana (1936-1937)
Autor/es:
MATIAS EMILIANO CASAS
Reunión:
Jornada; IV Jornadas Internacionales de Estudios sobre Revistas Latinoamericanas; 2021
Resumen:
La revista México Charro comenzó a publicarse en enero de 1936. Su director era Manuel Efrén Razo, fundador de la Asociación Metropolitana de Charros y una de las máximas referencias en la materia. La aparición de la publicación se correspondió con un tiempo favorable para las demostraciones ecuestres y tradicionalistas que realizaban esos grupos. Históricamente identificados con la aristocracia rural y con regiones particulares, que representaban solo una porción de la vastedad territorial y poblacional mexicana, los charros encontraron un espacio simbólico y cultural como componentes insoslayables de la mexicanidad. Ese reconocimiento se podía rastrear en los tiempos posrevolucionarios y estaba imbuido de vaivenes políticos. En la coyuntura de la emergencia de la revista, la charrería había sido reconocida como el ?deporte nacional? y la indumentaria charra como el ?traje mexicano?. Esos avales oficiales se sumaban a la presencia permanente de charros en desfiles y celebraciones. En ese marco, la publicación mensual México Charro se presentó para potenciar tanto la faceta deportiva -y competitiva- de la charrería como su rol central en la construcción de la ?tradición mexicana?. La revista se editó de manera interrumpida hasta la década del sesenta y se transformó en el órgano de prensa de la Federación Mexicana de Charrería. En esta ponencia, analizaremos la primera época, que abarcó desde su primer número hasta marzo de 1937. Consideramos que México Charro puede ser estudiada desde dos perspectivas. En primer lugar, como medio al servicio de la propaganda y la expansión de la charrería, sus instituciones y representantes. Es decir, como soporte material que nos habilita a explorar ese universo a partir de su composición interna, sus relaciones con el poder, sus relatos sobre el pasado, sus disputas, las intervenciones en la sociedad, etc.; en segundo lugar, como actor colectivo que buscaba ganarse un lugar en el mercado editorial mexicano, que diseñó diversas estrategias para captar a un público lector amplio, que tuvo lidiar con problemas de imprenta como otras revistas en la época, que se configuró como punto de encuentro legitimador para los charros y que cumplió un rol particular en la definición de la tradición mexicana.