La tradición en pugna. Los partidos políticos y la disputa por el monumento al gaucho, 1947-1948

MATIAS EMILIANO CASAS

Jornada; XXVII Jornada de Historia en Vicente López; 2014

La etimología de la palabra monumento constituye un buen punto de partida para comenzar el análisis sobre las disputas en torno a la concreción de ese homenaje al gaucho. Es decir, la figura del gaucho no sólo despertó tensiones en el ámbito de los textos escritos, sino que las contradicciones también se manifestaron en los largos caminos que transitaron los proyectos de monumentos al gaucho. El origen del vocablo proviene del latín monere cuya semántica indica ?recordar, llamar la atención?. En efecto, ese era el objetivo primario que persiguieron los impulsores y difusores de las diversas iniciativas. En diferentes momentos del siglo XX, quienes reivindicaban la figura del gaucho retomaron la cuestión del bronce ausente. Los debates generados en torno al tópico pusieron de relieve tensiones sobre los modelos propuestos, las causas de los fallidos y la representación del gaucho que se pretendía elevar. Las propuestas que se visibilizaron con mayor intensidad en los debates legislativos de 1947 tuvieron escasos antecedentes que se registran desde el contexto del centenario de la independencia argentina. En esa época, varios artículos publicados en la revista El Hogar cuestionaban la pertinencia de instalar un monumento al gaucho. En el transcurso de la segunda década del siglo XX, las expresiones que componían los niveles de disenso sobre los gauchos y la nacionalidad argentina parecían pronunciarse y reproducirse con mayor libertad en comparación con el caso de la década del cuarenta, expuesto anteriormente. En efecto, durante 1916, 1917 y 1918, se reprodujo el discurso opositor al homenaje desde las páginas del semanario.