INVESTIGADORES
MACHADO Mercedes Libertad
congresos y reuniones científicas
Título:
La escuela y el futuro como territorio de conquista en contextos de pobreza urbana.
Autor/es:
MACHADO MERCEDES LIBERTAD
Reunión:
Congreso; III Congreso de comunicación/educación; 2019
Resumen:
Nuestra actualidad marcada portransformaciones, crisis y cambios, envuelven a las instituciones en general ya la escuela en particular, en un sinfín cada vez más acelerado derequerimientos, obligaciones y reformas que deja a los sujetos que las habitansin mucho margen de respuesta en el presente y hacia el futuro. La pregunta porel porvenir y la escolaridad la realizamos en un clima de época que desdefinales de la Segunda Guerra Mundial se enfrenta a los cuestionamientos de lospilares de la vida moderna, entre ellos, las promesas de progreso y crecimientoconstante (Jameson, 2009; Lyotard, 1987; Habermas, 1998). De aquí en más, losprocesos de crisis y transformación de la sociedad capitalista involucraron almundo del trabajo, la organización del Estado-nación, así como a institucionesque, como la escuela, se han visto fuertemente reconfiguradas en torno de esaspromesas propias de la ilustración. Se trata de cambios que afectan las formasde ser y de constitución de los sujetos que suelen dejarnos perplejos conserias dificultades para desear y soñar. La institución escolar se ha vistointerpelada de muy diversos modos por distintas expectativas sociales. Laeducación está frecuentemente tensionada por la (im)posibilidad de sostenersesin un horizonte de futuro en tanto involucra una promesa de futuro que, aveces, pareciera ya no ser posible en el presente (Grinberg, 2008). De hecho,tal como lo señala Fainsod (2007), los debates socio educativos se han dirimidoen esa tensión entre las visiones encantadas y desencantadas respecto de lasfunciones y las posibilidades de la escuela. Desde los estudios degubernamentalidad nos es posible identificar un conjunto de enunciados querefieren a la producción y la necesidad de un nuevo sujeto que es llamado amoverse, mutar y/o auto-gestionarse en la sociedad del conocimiento(Grinberg, 2008). El acento ahora está puesto en la autonomía individual y lacapacidad para adaptarse permanentemente (Rose, 2007; Sennett, 2000), ello enun mundo en el que parecería que ya no se puede prever de un modo estable elfuturo, porque la incertidumbre y la crisis se volvieron, justamente, lo másestable (Grinberg, 2011). Por otro lado, a través de los debates en torno de lautopía, el nihilismo, la esperanza y sus modulaciones en las sociedadescapitalistas -que no son tan nuevos y han sido tempranamente abordados porautores como Nietzsche (1999), y ya en los inicios del siglo XX por Bloch(2004)-, entendemos al futuro como aquello que contiene tanto lo temido como loesperado o deseado. En este marco de debates, la escuela es denunciada por nogenerar espacios de formación y los/as jóvenes culpados por la falta devalores, proyectos, sueños, interés e iniciativa (Grinberg, Dafunchio yMachado, 2011), reproches que en la escuela se hacen más frecuentes cuandolos/as jóvenes viven en contextos de extrema pobreza urbana. Estoscuestionamientos constituyen parte fundamental de los procesos de crisis ycambios de los dispositivos pedagógicos de nuestros tiempos. A pesar de las imágenes nihilistasque pesan sobre los/as jóvenes, en las escuelas nos encontramos con estudiantesque hablan de sus valores, deseos y sueños. Retomando a Agamben (2001), nospreguntamos en qué medida les reclamamos a los/as jóvenes aquello que nosotrosmismos, los adultos, no podemos sentir o vivir. Ello en un contexto en el quelas escuelas, los/as profesores/as se encuentran lidiando con un sinnúmero detareas, responsabilidades y preocupaciones, atravesados por las permanentestransformaciones del sistema educativo y el cuestionamiento sobre su función. En este marco de referencias, elpresente trabajo describe los modos en que los/as estudiantes piensan en tornodel futuro y el papel que le asignan a la escolaridad y a sus barrios en esaconstrucción, sobre todo porque la escuela sigue ocupando un papel central enla vida de los sujetos, aún más en el caso de aquellos/as que viven encontextos de extrema pobreza urbana y degradación ambiental. Asimismo, sediscutirá sobre las múltiples modulaciones que el futuro adquiere en estosespacios urbanos en particular, como territorios a conquistar, espacios ytiempos diseñados estratégicamente por los/as estudiantes desde sus escuelas ysus barrios. A través del trabajo de investigaciónen las escuelas y con los/as estudiantes, propongo a modo de hipótesis, que lainstitución es un lugar/tiempo de conquista de futuro para quienes la habitancomo estudiantes. Esto ocurre en el hecho en sí de estar ahí y pensar/soñar esefuturo.  La escuela es un lugar/tiempo demúltiples sentidos, desde donde conquistan futuros, los diseñan. En estatravesía de explorar lo que aún no llegó, los/as estudiantes no niegan suscondiciones de pobreza y desigualdad, denuncian las injusticias sociales pormedio del deseo de vida y de sus relatos hacia el futuro.En tiempos y espacios urbanos teñidospor el desencanto y la desconfianza por lo que vendrá, la pregunta por losrelatos de futuros se vuelve central para pensar la institución escuela, alos/as estudiantes y los adultos que allí conviven e, incluso, a la sociedad engeneral. Entiendo que estos modos de acercarse al porvenir desde la escuela,nos dan indicios sobre otras formas de pensar la intersección entreescolaridad, barrio, presente y futuro. De igual modo, la indagación sobre ellugar que ocupa la escuela en el entramado de futuros de los/as jóvenes quenacieron, se criaron y viven en contextos de extrema pobreza urbana devienereveladora. Nos aporta claves para seguir profundizando en la pregunta sobre quienessomos, quienes queremos ser y en que nos estamos convirtiendo en ese devenir. Al respecto propongo que el pensarfuturos en estos contextos en particular, se constituye en modos que tienen lossujetos de fugar(se) de muchos de los presagios y fatalismos, que pesan sobresus destinos. En estos espacios urbanos, la apertura de lo posible y laconquista de lo que no llegó, adquieren connotaciones clave que son objeto deproblematización aquí. Nos ocupamos de las múltiples formas en que los/asestudiantes piensan, desean y temen el futuro en la intersecciónbarrio-escuela: muchas veces, de modos silenciosos, imperceptibles, difusos.El trabajo en terreno queretomamos involucró estrategias múltiples que procuraron adentrarseen los modos que los/as estudiantes relatan y piensan la escolaridad y elfuturo en la intersección escuela-barrio. Nos centramosen aquellos/as sujetos que nacieron en contextos de extrema pobreza urbana, hijos/asde los llegados, de los sin lugar que encuentran y hacen su lugar en estosespacios urbanos. Esas poblaciones que han quedado libradas a su propia suerteen el marco de las sociedades de gerenciamiento (Grinberg, 2008, 2011); jóvenesque sueñan sabiendo las condiciones en que lo hacen, en especial, que saben queese sueño y su realización es en sí línea de fuerza.Aquí, se trata de caracterizar lasimágenes, preocupaciones, deseos y miedos que manifiestan los/as estudiantescuando piensan en la intersección futuro/barrio/escolaridad. Relatos que resultancentrales para describir muchas de las tensiones que se observan en el devenircotidiano de la escolaridad, así como para delinear cursos de acción más alláde los fatalismos que pesan sobre los/as jóvenes y sus escuelas. Entiendo que estascondiciones sociales siempre suponen tensiones, grietas y posibilidades deresistir, de transformar, de desear. En esta dirección, recuperolos diversos y múltiples modos que los/las estudiantes presentan a la hora decartografiar (sus) futuros en la intersección barrioescuela.