Brujería, acusaciones y traición en el servicio doméstico: Empleadas domésticas y empleadores en Buenos Aires

CANEVARO, SANTIAGO

Buenos Aires

Jornada; Jornadas de Estudio: Trabajo Doméstico Remunerado. Perspectivas cruzadas latinoamericanas; 2010

Universidad de General Sarmiento y Universidad nacional de San Martín

  La presentación analiza la relevancia que tienen las acusaciones en los procesos de ruptura del vínculo laboral entre empleadas domésticas y empleadores. Estas circunstancias constituyen instancias privilegiadas para analizar el “formato de relación” desde el cual se configuró la relación. Será un objetivo del trabajo reconstruir la lógica de la interacción social cuando emergen acusaciones de robo proferidas por los propios empleadores. Sin embargo, siguiendo la propuesta analítica de Evans Pritchard (1927) interpretamos que la acusación de robo a las empleadas domésticas emerge en ciertas situaciones y no en otras, al igual que la creencia sobre la brujería para la tribu Azande. Así, la presentación de un reclamo judicial por parte de las empleadas domésticas se constituye en la prueba principal que ofrece una explicación inteligible y coherente en sus propios términos acerca de un fenómeno cotidiano y hasta ciertamente tolerable para los empleadores. Por tanto, mostraremos cómo mientras que para los empleadores el tema de los hurtos forma parte del discursivo cotidiano siendo que se manejan para las empleadas domésticas no constituye un tema al que busquen referirse sino que tampoco manifiestan conocer a empleadas que hayan tramitado de alguna manera con esa experiencia. Luego, el interés del trabajo estará puesto en reparar en el “lenguaje moral” que surge de los expedientes judiciales que presentan como demandas las empleadas domésticas ante el Tribunal del Servicio Doméstico reparando en los tipos de narrativas que utilizan los abogados de los empleadores para responder a las demandas. Alli podremos exhibir estereotipos de clase, que incluyen el robo, la deshonestidad, la ingenuidad y el cuestionamiento de la fibra moral de las denunciantes. Las mismas serán comprendidas como acusaciones morales que pretendiendo deslegitimar el reclamo legal, muestran la relevancia que la lógica personal del universo moral del hogar tiene aún en los espacios institucionalizados y públicos como un juicio laboral.             Por último, exhibiremos a partir de la trayectoria de una empleada doméstica cómo funciona la “coerción moral” al inhibir la realización de un reclamo judicial. Veremos la relevancia que adquiere la “gratitud”, la “consideración” y la “lealtad” en la configuración de vínculos de gran intensidad afectiva. En tal sentido, haremos una reconstrucción de las tensiones y conflictos que se generan en distintos momentos mostrando como funcionan sin llegar a la ruptura la lógica de las deudas morales y jurídicas entre las partes. Si bien las empleadas domésticas no ignoran las deudas laborales de sus empleadores, debemos comprender que cobrar la deuda jurídica equivaldría sin embargo a hacer como si la otra deuda no existiese. En tal sentido, no realizar el juicio laboral supone la ubicación del empleador como acreedor en relación con las obligaciones morales. Será en los delicados equilibrios que se mantiene entre las deudas morales y las deudas jurídicas donde se ponen en juego sus límites y las posibilidades de ruptura.