INVESTIGADORES
IBIRICU Lucio Manuel
congresos y reuniones científicas
Título:
Estudio tafonómico preliminar de Katepensaurus goicoecheai de la Formación Bajo Barreal (Cretacico Superior), cuenca del Golfo San Jorge
Autor/es:
CASAL, GABRIEL A.; IBIRICU, LUCIO M.; ALVAREZ, BRUNO N.; MARTÍNEZ, RUBÉN D.; LUNA, MARCELO
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Jornada; Reunión de Comunicaciones de la Asociación Paleontológica Argentina 2018; 2019
Resumen:
Se analizan los atributos tafonómicos del saurópodo rebaquisáurido Katepensaurus goicoecheai (UNPSJB-PV 1007), procedente de la Formación Bajo Barreal (Cretácico Superior) en el centro-sur de Chubut. Los restos se preservaron en un depósito de desbordamiento no canalizado, asociado a canales fluviales de baja sinuosidad y diseño entrelazado. El depósito presenta geometría lobulada, 20 a 30 cm de potencia y está integrado por areniscas gruesas con abundante matriz pelítica y tobácea, que permiten caracterizarlo como un flujo hiperconcentrado. Los elementos recuperados corresponden principalmente al esqueleto axial, estaban desarticulados y exhiben fracturas longitudinales y exfoliación en escamas, evidenciando una exposición subaérea prolongada. Presentan abrasión por transporte hidráulico y una reorientación NW?SE, normal a la dirección del paleoflujo. La dispersión lateral es agrupada producto de entrampamientos hidráulicos causados por los restos de mayor tamaño. La escasa potencia del desbordamiento no sepultó completamente los restos, quedando estructuras expuestas que fueron intensamente erosionadas. Posteriormente un nuevo desbordamiento los cubrió completamente. En cuanto a los procesos fosildiagenéticos, los restos exhiben escasa deformación plástica por presión litostática. La estructura ósea, formada originalmente por hidroxiapatita fue modificada a fluorapatita. Los procesos de permineralización en los canales vasculares precipitaron como una primera capa con hematita sobre los bordes de los mismos, luego calcedonia, cuarzo y finalmente zeolitas rellenándolas completamente. La similitud en la composición química de los fósiles y de la roca portadora de los mismos sugiere que el enriquecimiento con nuevos elementos fue debido al intercambio directo con los sedimentos en los que fueron enterrados.