La gestión de enfermedades en los espacios domésticos del Noroeste en el entresiglos del XIX al XX. Representaciones, prácticas y materialidades entre la religión y la terapéutica

CHAILE, TELMA

Capital Federal

Workshop; Perspectivas analíticas y nueva agenda de trabajo. Catolicismo y agencias religiosas entre siglos los siglos XVIII y XX; 2021

Grupo Religio, Instituto Ravignani

Un conjunto de documentación edita que contiene relatos de promesa realizadas durante el entresiglos XIX-XX por devotas y devotos de la Virgen del Valle de Catamarca, que residían en varias jurisdicciones eclesiásticas del Noroeste argentino, posibilitó abordar la gestión de enfermedades diversas en algunos espacios domésticos, en un cruce entre religión y terapéutica. Esta relación no era para nada infrecuente en el catolicismo, teniendo en cuenta la larga tradición por la cual la salud física de las feligresías también formaba parte de sus objetivos. Durante el siglo XIX, algunos sacerdotes con actuación en jurisdicciones eclesiásticas del NOA vincularon la sanación del cuerpo al bienestar espiritual de las personas, sanación que podía ser obtenida a través de la devoción a la Virgen María, representación que era compartida por las feligresías y que circulaba mediante relatos de curación, sermones y lecturas devocionales, entre otras modalidades. Prácticas particulares y colectivas, en las que estaban involucradas una variedad de advocaciones religiosas, hacían que las personas transitaran por vivencias corporales de manifestación de lo numinoso construido frecuente en la cotidianeidad de las situaciones de enfermedad. Así, prácticas terapéuticas y prácticas de cuidado de personas enfermas y las cuales se realizaban en espacios domésticos no estaban desvinculadas de lo religioso al intersectarse de manera concreta en las promesas a la Virgen del Valle de Catamarca. La advocación mariana del Valle fue una de las más prestigiosas en el período de estudio y para la cual se multiplicaron los esfuerzos promocionales de su culto provenientes de agentes eclesiásticos y de feligresías de parroquias del Obispado de Salta y luego del de Tucumán, de la orden franciscana de Catamarca, Tucumán y Salta, así como de las jerarquías de las dos diócesis y de la élite catamarqueña.