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Patagonia Norte es recurrentemente afectada por caídas de tefra proveniente de los volcanes andinos. Estos depósitos generan perturbaciones en las cuencas hídricas y originan diversos procesos hidrogeomórficos, tanto en ambientes subaéreos como subacuáticos, que pueden afectar a la población e infraestructura. A partir de un evento de caída de tefra, los deltas de sistemas cercanos al centro emisor, experimentan un notable crecimiento por efecto del transporte fluvial y posterior redepositación del material piroclástico caído sobre las cuencas hídricas (Beigt et al, resúmenes de este congreso). Para este trabajo se seleccionó la cuenca del río Machete donde se registraron espesores de hasta 30 cm de tefra (Alloway et al, 2015) producto de la erupción del Cordon Caulle (CC) 2011.El objetivo principal fue analizar los impactos hidrogeomórficos generados en el sistema fluvial del río Machete y su delta, (Fig.1 A). durante y posteriormente a la caída de tefra. Se realizó la delimitación de la cuenca hidrográfica (Fig. 1 A) utilizando Google Earth Pro, y en ambiente SIG se obtuvieron sus parámetros morfométricos básicos (Área (A), Longitud (L), Perímetro (P) y aquellos derivados de estos, tales como parámetros de forma (Relación de Elongación (Rel), y Coeficiente de Compacidad (Kc)). Utilizando el Sistema de Información Geográfica Qgis, se digitalizaron los diferentes órdenes de corriente, utilizando la jerarquización de Strahler (1964). Además se determinaron parámetros propios de la red de drenaje (Frecuencia, Densidad, Diseño, y Longitud del cauce principal). Se analizaron imágenes Landsat y Spot, comparando la situación del año 2011 (erupción del CC) con la de los años 2007, 2012 y 2013 con el fin de detectar cambios geomorfológicos posteriores a la erupción. Finalmente se procesaron las batimetrías realizadas en noviembre del año 2011, usando un sonar batimétrico por medición de fase con el fin de determinar morfologías subacuáticas. La cuenca del río Machete tiene un área de 192 km², una longitud de 14,30 km², un perímetro de 65,4 km y un ancho medio de 2,93 km. Con respecto a los parámetros de forma, los valores obtenidos (Rel = 1,09 y Kc = 1, 32), indican que la cuenca tiene una forma circular a ovalada. Según la jerarquización de Strahler la cuenca es de orden 6. Presenta dos niveles de base locales, el lago A. Gallardo y una laguna sin nombre, de 7,43 y de 0,64 km² de superficie respectivamente. El río machete tiene sus cabeceras en la Cordillera de los Andes, próximo al límite con Chile y su nivel de base regional es el Lago Nahuel Huapi, en el denominado brazo Machete .La frecuencia del drenaje es de 1,7 y la densidad del mismo es de 1, 58 km/km². Tiene una longitud total de 28,220 km. El diseño del drenaje es subdendrítico en las cabeceras pero el río Machete presenta un carácter meandriforme en gran parte de su recorrido. Tanto la laguna sin nombre como el lago Gallardo se comportarían como ?trampas? de sedimentos dentro de la cuenca fluvial, disminuyendo la carga sedimentaria del emisario principal. En la imagen satelital del 26/06/2011 (Fig. 1B) se observa pómez flotante retenida en la superficie de ambos cuerpos de agua, evidenciando abundante ingreso de tefra del Cordón Caulle. Durante el año de la erupción se evidenciaron cambios en los dos cauces activos principales del río Machete (cauce sur y cauce norte) cercanos a su desembocadura (Fig. 1C). Para el caso del cauce sur se vuelve netamente anastomosado luego de la erupción (Fig. 1D). Los depósitos de point bar del cauce activo norte experimentaron una agradación (Fig. 1D). En la parte más proximal del delta se observó un pequeño cuerpo de agua que se colmató durante el año de la erupción (Fig. 1E). Una barra de desembocadura creció lateralmente, posiblemente producto de la rápida sedimentación. La línea de costa se desplazó significativamente durante y posteriormente a la erupción de la erupción. Al analizar la morfología subacuática del delta se observaron cicatrices probablemente asociadas a deslizamientos, estas no se observan erosionadas, y siendo este un ambiente progradante, indicaría que son relativamente recientes, aunque no puedan vincularse con certeza al evento de sedimentación post-eruptiva. Estos resultados preliminares indican que tanto la cuenca como el delta del Machete sufrieron cambios morfológicos durante la erupción de CC de junio de 2011. Lo presentado en este trabajo se ampliará a distintas cuencas hídricas del Parque Nacional Nahuel Huapi, continuando el análisis de los procesos hidrogeomórficos en sistemas fluvio-lacustres afectados por erupciones recientes, en el marco de mi tesis doctoral.

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