INVESTIGADORES
BEIGT Debora
congresos y reuniones científicas
Título:
Ciclo anual de las temperaturas y flujo de calor en el suelo en una planicie de marea del estuario de Bahía Blanca
Autor/es:
BEIGT, DÉBORA; PICCOLO, MARÍA CINTIA; PERILLO, GERARDO M.E.; DOS SANTOS, EDER
Lugar:
Mar del Plata
Reunión:
Jornada; V Jornadas Nacionales de Ciencias del Mar. XIII Coloquio Argentino de Oceanografía; 2003
Institución organizadora:
IAPSO - Univ. Nac. de Mar del Plata - INIDEP
Resumen:
Resumen   Durante un período anual se midió la temperatura del agua, aire y sedimentos en una planicie mareal de Puerto Cuatreros, ubicado en un sector cercano a la cabecera del estuario de Bahía Blanca. El objetivo fue analizar las temperaturas en el sedimento, aire y agua a lo largo del período enero-diciembre 2000 y relacionarlas con las fluctuaciones estacionales del intercambio de calor en el suelo, describiendo algunos de los procesos de interacción que ocurren en las interfases sedimento-agua y sedimento-aire.El estudio forma parte de una investigación interdisciplinaria tendiente a establecer nexos entre parámetros físicos registrados en distintas estaciones del estuario (temperatura, radiación solar, altura de marea, salinidad, transparencia del agua) y parámetros bióticos y abióticos medidos simultáneamente (clorofila “a”, feopigmentos, nutrientes y muestras de micro, meso y macrozooplancton). La temperatura del aire presentó la mayor amplitud anual, alcanzando los 22,3ºC. El agua mostró una amplitud térmica de 18,4ºC, mientras que las ondas de temperatura en el suelo redujeron su amplitud con la profundidad (19,5ºC, 17,6ºC y 16,5ºC para las profundidades de 5 cm, 15 cm y 25 cm respectivamente). Mediante fórmulas aerodinámicas de masa se calculó el balance de calor en el suelo para cada ciclo diario del año 2000. El máximo pico de ganancia de calor por parte del sedimento se observó en enero (1,23 MJ m-2). La máxima tasa diaria de pérdida de calor fue de –1,63 MJ m-2 durante el mes de julio. El balance anual estimado fue de –32,9 MJ m-2. Una explicación preliminar de esta pérdida de calor es que la energía calórica puede haber sido transferida desde el sedimento hacia el agua y posteriormente disipada en la circulación mareal del estuario.