INVESTIGADORES
PIEMONTE Victor Augusto
congresos y reuniones científicas
Título:
Cuestión nacional y lucha de clases en la Segunda Internacional Socialista: una interpretación sobre el origen del comunismo argentino
Autor/es:
VÍCTOR AUGUSTO PIEMONTE
Lugar:
San Carlos de Bariloche
Reunión:
Jornada; XII Jornadas Interescuelas/Departamentos de Historia; 2009
Institución organizadora:
Departamento de Historia de la Universidad Nacional del Comahue
Resumen:
Al promediar el año 1912, la existencia de una vertiente que se reconoce a sí misma como revolucionaria y que reivindica los componentes más radicales de la doctrina socialista, es una realidad que da cuenta de la tendencia a la generación de dos posiciones contrastantes al interior del socialismo argentino. Esta tendencia dejará de ser tal y se convertirá en una realización consolidada cuando los acontecimientos de la Gran Guerra involucren a la Argentina, obligando a la toma de decisiones alrededor de la intervención o del neutralismo, al tiempo que el éxito de la revolución bolchevique y la resolución de su parte en el conflicto internacional potenciará las posiciones del “pacifismo revolucionario”. Dichas diatribas no tienen lugar ex nihilo, sino que se inscriben en el marco de una discusión mucho más amplia, que tiene su epicentro en el continente europeo. Con la guerra se juega la concepción socialista de revolución social, indisolublemente atravesada por el carácter político y social que se estuvo dispuesto a conceder a las masas proletarias y a sus formas de intervención práctica. Pero no es la guerra la que contagia el nacionalismo en los partidos socialistas, sino que es el nacionalismo ya existente y en proceso de maduración el que induce a la socialdemocracia a votar afirmativamente los créditos de guerra. Es en la distinta concepción que cada uno de sus grupos identificables se fue forjando respecto de las nacionalidades y sus posibles diálogos con la lucha de clases donde se ha de encontrar una explicación coherente a los posicionamientos adoptados por los socialistas a medida que la guerra era una posibilidad cada vez más cercana. La habilidad para operar con una flexibilidad relativa en los compromisos políticos que se debatían en el seno del socialismo internacional era producto de las características con que había sido gestada la Segunda Internacional. Tratándose de un foro para la circulación de polémicas más que de un organismo con fines pragmáticos, su misma naturaleza constitutiva contemplaba la adopción de posiciones enfrentadas.  A través de la defensa encarnizada del librecambio, el grupo “parlamentario” del Partido Socialista argentino arribó a la conclusión de que los derechos e intereses de los trabajadores se encontraban integrados en el conjunto más amplio de los derechos e intereses nacionales. Esta posición terminó por representar un antagonismo irreconciliable respecto de los postulados internacionalistas que sostenía el marxismo revolucionario argentino, provocando la separación definitiva de las dos fuerzas.