INVESTIGADORES
ANAPIOS Luciana
congresos y reuniones científicas
Título:
Terrorismo o propaganda por el hecho. Los debates sobre la utilización de la violencia en el anarquismo argentino a fines de la década del ´20
Autor/es:
LUCIANA ANAPIOS
Lugar:
La Falda, Córdoba
Reunión:
Jornada; II Jornadas Nacionales de Historia Social; 2009
Institución organizadora:
Centro de Estudios Históricos Profesor Carlos Segretti; Centro de Estudios de Historia Americana Colonial CEHAC; CONICET; Agencia de Promoción Científica y Tecnológica
Resumen:
A partir de la década del ´20 y en un contexto de declive de la conflictividad obrera con respecto al período anterior, las diferencias internas dentro del movimiento anarquista ?siempre presentes? cobraron un nuevo vigor. Se delinearon dos corrientes principales en torno a los periódicos La Protesta y La Antorcha" que se enfrentaron alrededor de dos ejes; por un lado disputas de poder por el manejo de los recursos; por otro, diferencias en cuanto a los métodos y tácticas a emplear frente a desafíos concretos. Una característica novedosa de estos debates con respecto al período anterior fue el nivel de agresión y violencia interna al que dieron lugar. En este contexto surgieron sectores minoritarios que reivindicaban el uso de la violencia como forma de lucha. La ejecución de Sacco y Vanzetti en Estados Unidos, en agosto de 1927, favoreció un clima de protesta y movilización en el que algunos sectores radicalizaron su discurso y otros pasaron a la acción a través de atentados a sitios simbólicos. Este trabajo propone un recorrido por las discusiones que se reabrieron en torno a la utilización de la violencia y los debates morales y éticos a los que dio lugar la ola de atentados en la segunda mitad de los años ´20, en un contexto de creciente conflictividad interna.¿Cuál era el límite de la violencia?, ¿la justicia de una causa justificaba la muerte de civiles?, ¿las explosiones y atentados podían ser justificados como una respuesta a la violencia de la sociedad burguesa?, ¿qué lugar le cabía a la responsabilidad del militante que se consideraba con derecho a matar?. La irrupción de la violencia interna y la multiplicación de actividades ilegales y atentados fue el telón de fondo sobre el cual se polarizaron las posiciones y se reforzaron identidades. La Protesta calificó de ?guerrilleros? o ?terroristas? tanto a los promotores de las bombas como a los integrantes de las corrientes disidentes, haciendo de ambos términos un uso descalificador. Pero todas las corrientes hicieron un uso ambiguo de estos términos, alternando entre terrorismo y propaganda por el hecho.