Estado de situación de Achatina fulica en la Argentina

GUTIÉRREZ GREGORIC, D.E.; NÚÑEZ, V.; VOGLER, R.E.; RUMI, A.

Puerto Madryn

Simposio; II Simposio Latinoamericano de Moluscos Bioinvasores; 2011

Asociación Latinoamericana de Malacología. CENPAT-CONICET

En la Argentina se registraban 22 especies exóticas de gasterópodos terrestres. En marzo del 2010 registramos por primera vez la presencia de Achatina fulica en territorio argentino, más precisamente en la ciudad de Puerto Iguazú (25°36´S - 54°35´O), en el extremo NO de la provincia de Misiones. Las densidades de A.fulica alcanzaron hasta los 180 ind/m2, mientras que las densidades de moluscos autóctonos promediaban los 6 ind/m2. Se registraron desde huevos hasta ejemplares de 110 mm, en suelo, árboles, postes, paredes y techos de casas. Si bien no es posible determinar con exactitud el medio de introducción de esta especie en nuestro país, el probablemente vector hayan sido pescadores que utilizan a este caracol como carnada y que posiblemente hayan liberado algunos ejemplares vivos en la ribera del Paraná o del Iguazú, próximo a la localidad de Puerto Iguazú. Se estima que esta especie fue introducida aproximadamente en el año 2007. En Brasil dicha especie se registra en casi todo el país, tanto en reservas naturales, en areas urbanas y agrícolas, donde es considerado plaga. Los sitios mas australes en Brasil y Paraguay, donde se registra a esta especie invasora, son localidades cercanas a las provincias argentinas de Misiones y Corrientes. La introducción de esta especie en territorio argentino podría causar problemas ecológicos, sanitarios y económicos, ya documentados en otros paises. Considerando los antecedentes que A. fulica presenta en varios países como plaga, se están desarrollando, conjuntamente con organismos nacionales, provinciales y municipales, pautas de control, educación preventiva y vigilancia para prevenir su dispersión.