Relevamiento del conflicto entre productores forestales y primates en la provincia de Misiones

TUJAGUE, M. P; BALDOVINO, M. C.; DI BITETTI, M. S.; HILGERT, N. I.; RADINS, M.; AGOSTINI, I; PFOH, R; DI BLANCO, Y. E.

Jornada; Jornadas Técnicas Forestales y Ambientales; 2019

FCF - UNaM y Ministerio de Agroindustria INTA Nación

El conflicto entre productores forestales y primates no humanos ocurre en numerosos lugares del mundo. Los monos capuchinos se encuentran entre las especies mayormente involucradas en conflictos con humanos en el Neotrópico (Rocha & Fortes, 2015). Su variabilidad comportamental y su flexibilidad ecológica, como también su gran capacidad de aprendizaje (Fragaszy et al., 1990), los hace propensos a ingresar de manera oportunista a plantaciones pequeñas e incluso plantaciones a gran escala (Freitas et al., 2008), donde dañan los árboles al descortezarlos. En el Bosque Atlántico se han registrado episodios de conflicto entre monos caí o capuchinos (Sapajus nigritus) y empresas forestales que producen pinos (Pinus spp.) desde hace más de 20 años (Liebsch & Mikich, 2015). El comportamiento de descortezado de los árboles ha sido descripto en detalle por Mikich y Liebsch (2014), quienes explican que, para consumir la savia del pino, los monos quitan la corteza entre los nudos del tercio superior de los árboles adultos. Usando sus caninos, los monos caí separan tiras relativamente largas (> 30 cm) y delgadas ( 20 árboles dañados. El daño nuevo será todo aquel que no estuviera presente en el mes anterior de muestreo. Para evaluar el daño entre diferentes sitios se utilizará el porcentaje medio de árboles dañados en cada parcela. Se compararán el daño medio por especie (en caso que las plantaciones incluyan diferentes especies) para cada productor y el porcentaje del daño total (Liebsch & Mikich, 2017). En una etapa preliminar del presente proyecto se realizaron entrevistas exploratorias a personas que estuvieron en contacto con el conflicto. Se realizaron 3 entrevistas, 2 de tipo individual a actores sociales que estuvieron en contacto con plantaciones de pino por cuestiones laborales y una de tipo grupal (con 4 participantes) en contexto de una reunión con personal de una empresa forestal. Esta primera etapa de entrevistas exploratorias ofreció una primera mirada para cada eje de indagación de las entrevistas, aunque en ninguno de ellos logró vislumbrarse algún indicio de SE valorado por los entrevistados más que el del beneficio económico disminuido por la pérdida de bienes materiales. Con las entrevistas se obtuvo una idea preliminar de la magnitud del problema generado por los caí y de la relación con el tamaño de los rodales forestales.