INVESTIGADORES
GONZALEZ ESTEBENET Maria Sol
congresos y reuniones científicas
Título:
Primera ingresión atlántica en Península Valdés: bioestratigrafía, paleoambiente y paleoclima del Daniano
Autor/es:
GONZÁLEZ ESTEBENET, M. SOL; PÉREZ PANERA, JUAN PABLO; NAVARRO, EDGARDO LUIS; ASTINI, RICARDO A.; GULER, M. VERÓNICA
Reunión:
Congreso; Geología y desarrollo, desafíos del siglo XXI, Congreso Geológico Argentino; 2022
Resumen:
El Pozo Península Valdés es-1 (Fig. 1) exhibe el registro estratigrá co más completo de la primeraingresión Atlántica en la Cuenca Valdés. La bioestratigrafía de quistes de dino agelados de pared orgánica (dinoquistes) y nanofósiles calcáreos permitió de nir tres intervalos estratigrá cos (Fig. 2). Intervalo I, de edad daniana temprana (885-845 mbnm) basada en la ocurrencia de las especies de dinoquistes Carpatella cornuta, Danea californica y Senoniasphaera inornata. La asociación de nanofósiles caracterizada por Markalius inversus, Placozygus sigmoides, Biscutum melaniae, Cruciplacolithus primus, C. tenuis, Neocrepidolithus spp. junto a alta abundancia de los dino agelados calcáreos Cervisiella spp. indican para el mismo intervalo la biozona de nanofósiles NP1. Intervalo II, de edad daniana temprana a media (805-835 mbnm) presenta las últimas ocurrencias (HOs) de los dinoquistes Deflandrea galeata y Cerodinium verrucosum en la base y de S. inornata y Trithyrodinium evittii en el techo del intervalo. Las asociaciones de nanofósiles con Chiasmolithus danicus, Cruciplacolithus primus, Hornibrookina teuriensis, H. edwardsii, Prinsius dimorphosus,P. martinii, P. tenuiculus, Toweius pertusus asociadas a abundantes dino agelados calcáreos permiten identificar las biozonas NP2 a NP4. Intervalo III, de edad daniana tardía (785-800 mbnm) contiene las HOs de los dinoquistes D. californica y Hafniasphaera cryptovesiculata. Por encima del intervalo III se observa un recambio en las asociaciones con taxa típicos del Oligoceno (e.g., dinoquistes Chiropteridium galea, Reticulatosphaera actinocoronata y nanofósiles Coccolithus pelagicus y Pontosphaera multipora). La abundancia de palinomorfos terrestres, con predominio de Classopollis, y muy bajas proporciones de dinoquistes y nanofósiles en los niveles basales del intervalo I, marcan el comienzo de la transgresión daniana, con la posterior instalación de ambientes neríticos (Fig. 2). Un episodio de máxima inundación en el techo del intervalo II queda re ejado por el incremento de dinoquistes característicos de ambientes neríticos externos (e.g. Spiniferites) y oceánicos (Impagidinium), la máxima diversidad y abundancia de nanofósiles y el registro de un nivel glauconítico (Masiuk et al. 1976). En el intervalo III la disminución en la diversidad, junto al incremento de los dinoquistes palaeoperidinioideos Ginginodinium spp. y Palaeoperidinium pyrophorum denotan cambio de condiciones marinas normales (neríticas) a condiciones más restringidas (e.g. baja salinidad) e incremento en la disponibilidad de nutrientes (Fig. 2). Altas abundancias de dinoquistes termofílicos (e.g. T. evittii, Hafniasphaera spp. y Cordosphaeridium spp.) en el intervalo I indican temperaturas relativamente altas del agua superficial del mar para el Daniano temprano, mientras que el predominio de Senegalinium, P. pyrophorum y Ginginodinium en los intervalos II y III refleja la disminución relativa de la temperatura hacia el Daniano medio-tardío (Fig. 2). Si bien durante el Maastrichtiano y Daniano extensas áreas de Patagonia fueron inundadas por la primera ingresión Atlántica, la sucesión sedimentaria daniana aquí analizada, constituye el registro marino más antiguo que apoya sobre las sedimentitas continentales cretácicas del Grupo Chubut infrayacente; no se han reconocido sedimentitas marinas maastrichtianas (Masiuk et al. 1976, Caramés et al. 2004, Malumián y Náñez 2011, este estudio). De esta manera, la conexión del mar epicontinental con el mar abierto, presumiblemente a través de pasajes marítimos someros, no habría ocurrido con anterioridad al Daniano en la Cuenca Valdés.