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Las especies invasoras representan numerosas amenazas para los ecosistemas, ya que compiten con las especies autóctonas por los recursos y las desplazan de sus hábitats. Una de las aves más invasoras a nivel global es el Estornino Pinto (Sturnus vulgaris), que comenzó a expandirse en Argentina de manera alarmante. A pesar de su potencial invasor, no hay aún suficiente información sobre el éxito reproductivo, los factores que lo afectan y su tasa de reclutamiento poblacional. Monitoreamos 100 nidos de Estornino en un bosque nativo del noreste de Buenos Aires, durante las temporadas reproductivas 20202021 y 20212022. Estimamos los parámetros de reproducción para la población (tamaño de la nidada, número de volantones, supervivencia del nido, entre otros) y medimos las características del sitio de nidificación a diferentes escalas espaciales para evaluar si influyeron en la supervivencia y la productividad del nido. Los estorninos comenzaron a reproducirse antes que las especies autóctonas, usaron tres tipos de cavidades (natural, huecos de carpinteros y nidos de Furnarius rufus). Produjeron ~3 volantones por nido exitoso y tuvieron una probabilidad estimada de éxito del nido del 38 %. Las tasas de supervivencia diaria (TDS) se relacionaron negativamente con el diámetro del árbol del nido a la altura del pecho (DAP), pero no con las características del paisaje. La supervivencia y la productividad del nido son considerablemente más altas que las de las aves nativas que anidan en cavidades en estas latitudes. La relación inversa entre el DAP y TSD podría indicar que la preservación de árboles maduros podría ayudar a reducir la tasa de éxito del nido, aunque nuestros resultados no son conclusivos en este aspecto. El alto éxito reproductivo que encontramos sugiere que el efecto de los estorninos en las aves autóctonas necesita más estudios y es posible que las poblaciones de estorninos deban controlarse pronto.

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