INVESTIGADORES
BARREIRO Alicia Viviana
congresos y reuniones científicas
Título:
Representaciones sociales de la historia argentina. Valoración de los eventos considerados más relevantes
Autor/es:
BARREIRO, ALICIA VIVIANA; SOSA, FERNANDA; ZUBIETA, ELENA
Lugar:
Salta
Reunión:
Congreso; XIV Congreso Argentino de Psicología. “Los Malestares de la época”; 2012
Institución organizadora:
Colegio de Psicólogos de la Provincia de Salta
Resumen:
La memoria colectiva refiere al conjunto de representaciones del pasado que un grupo produce, conserva, elabora y trasmite a través de la interacción de sus miembros (Páez & Liu, 2009). Así, la actividad de recordar colectivamente influirá sobre los antecedentes y efectos de la memoria individual (Páez, Valencia, Pennebaker, Rimé & Jodelet, 1998). Entonces, hablar de memoria colectiva implica considerar procesos psicológicos que superan la esfera individual e intersubjetiva de la memoria, en tanto refiere a la instancia interaccional en la que emerge el recuerdo de los grupos, naciones y etnias. El convertirse en miembro de un grupo significa asumir e internalizar las tradiciones comunes y las representaciones sociales compartidas por éste (Liu & Lazlo, 2007). Gran parte de la memoria colectiva de los grupos se encuentra constituida por representaciones sociales de la historia que tienen la función de explicar a un grupo social cómo es que su realidad llegó a ser lo que es y brindar una justificación a las respuestas y actitudes ante desafíos del presente (Páez & Liu, 2009). Además, las narrativas históricas constituyen la esencia de la identidad de un grupo, las características de los vínculos que establecen con los otros grupos, y otorgan un abanico de opciones posibles para enfrentar los problemas del presente (Sibley, Liu, Duckitt & Khan, 2008). En este sentido, las memorias colectivas no aluden sólo a representaciones sino también a un conjunto de actitudes, prácticas cognitivas y afectivas que prolongan de manera irreflexiva las experiencias pasadas en el presente (Páez & Liu, 2009). La historia de un grupo social se transmite de una generación a otra tanto por los relatos orales como por fuentes oficiales donde cobra particular importancia la enseñanza escolar de la historia. Los estudiantes reconstruirán y transmitirán la historia oficial por los próximos 40 años (Pennebaker, Paez & Deschamp, 2006). La versión oficial de la historia que se enseña en las escuela se caracteriza por transmitir una versión moralizada de los hechos y personajes históricos, donde priman las interpretaciones en términos de “los buenos” y los malos”, “vencedores” y “vencidos”, categorías que no están destinadas a promover la comprensión del pasado, sino a generar lealtad y a conformar la identidad nacional en función de las necesidades del presente (Carretero, 2011). Los estudios que han indagado las representaciones sociales de la historia universal, han puesto de manifiesto un conjunto de sesgos y rasgos comunes en el recordar colectivo. Por ejemplo, los resultados indican la existencia de un patrón narrativo de la violencia como “partera de la historia” (Páez et al. 2008). Las revoluciones y las guerras se presentan como los eventos más importantes del último milenio, mientras que la ciencia y la tecnología son secundarias en importancia. Liu y Laszlo (2007) dan dos explicaciones complementarias a estos resultados: por un lado, la saliencia de las guerras por sobre otros procesos históricos que son más impersonales y de desarrollo más lento y, por el otro, su dramatismo y el hecho de que sus actores pueden ser categorizados fácilmente como “buenos” o “malos”. Junto a la violencia como patrón narrativo, se identificó un sesgo hacia la mención de hechos ocurridos en los años y siglos recientes, dando cuenta de que la memoria colectiva está relacionada con “eventos más frescos” vividos por una cohorte, ya sea la personal, de los padres o de los abuelos, que se transmite como experiencia vivida. Los estudios previos también han identificado un sesgo nostálgico, consistente en valorar como cambios positivos eventos históricos del pasado negando sus aspectos negativos y valorar más negativamente los hechos cercanos en el tiempo (Pennebaker, Paez & Deschamp, 2006). Sin embargo, hasta el momento no se cuenta con antecedentes que hayan indagado las representaciones sociales de la historia argentina. Por lo tanto, el objetivo principal de la investigación que aquí se presenta es la indagación de las representaciones sociales de la historia argentina en jóvenes y adultos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Específicamente en este trabajo se presentan los hechos que son considerados como más relevantes por los participantes y su valoración de los mismos.