NANO-ARCILLAS ARGENTINAS COMO SOPORTE PARA NISINA

VANESA MOLINA; MARIELA FERNANDEZ; PATRICIA EISENBERG; MARIANA BLANCO MASSANI; ROSA TORRES

Buenos Aires

Jornada; 6to Encuentro de Jóvenes Investigadores en Ciencia y Tecnología de Materiales; 2017

INTI

El uso de bacteriocinas como agentes antimicrobianos de origen natural ha sido sugerido para la obtención de materiales plásticos activos (Perez Espitia y col. 2012). Estos péptidos catiónicos son considerados seguros (GRAS) para su aplicación alimentaria y presentan actividad inhibitoria frente a microorganismos patógenos y deteriorantes de alimentos (Blanco Massani y col. 2008). En el caso particular de materiales plásticos para aplicación en envases activos, las condiciones de procesamiento pueden involucrar altas temperaturas y tiempos de residencia prolongados, disminuyendo la capacidad inhibitoria de péptidos lábiles como las bacteriocinas (Blanco Massani y col. 2016, Mellinas y col. 2016). Se han estudiado diversos métodos para la obtención de películas con actividad antimicrobiana que utilizan tratamientos térmicos suaves que no superan los 90ºC. Entre ellos podemos nombrar la inmersión (soaking) del material polimérico dentro de una solución activa (Mauriello y col., 2004, Blanco Massani y col. 2008), contacto y adsorción (Guerra y col., 2005, Blanco Massani y col. 2013, Correa y col. 2017), casting (Blanco Massani y col. 2014a, Mellinas y col. 2016), spray, spreading y spin-coating (Mauriello y col., 2004; Han y col., 2007; Iseppi y col., 2008). También pueden obtenerse películas poliméricas que contengan el antimicrobiano en su matriz por extrusión del material junto al compuesto inhibitorio (Del Nobile y col., 2009). Sin embargo, la activación durante la extrusión de polímeros sintéticos (PVC, PEBD, PP, PET, etc.) y algunos biodegradables como el PHB y PLA obliga a la elección de agentes antimicrobianos térmicamente estables, ya que las temperaturas de procesamiento van desde 80 a 260 ºC, dependiendo del polímero. La nisina es una bactericina que ha sido usada como preservante de alimentos, y se ha informado que es estable a pH ácido luego de ser tratada a 115.6°C (Question number EFSA-Q-2005-031, 2006). Las arcillas montmorillonitas (MMT) son aluminosilicatos 2:1 que presentan características estructurales con una alta capacidad de intercambio catiónico (CIC). Esta característica ofrece la posibilidad de utilizar las MMT como soporte para bacteriocinas (Ibarguren y col. 2014).