INVESTIGADORES
CRISTOFOLINI Eber Ariel
congresos y reuniones científicas
Título:
PETROLOGÍA Y ESTRUCTURA INTERNA DE LOS CERROS SAMPACHO Y ÁSPERO: EVIDENCIAS DEL EFECTO DE LA FAJA DE CIZALLA LAS LAJAS EN LAS ESTRIBACIONES MÁS AUSTRALES DE LA SIERRA DE COMECHINGONES, PROVINCIA DE CÓRDOBA
Autor/es:
CRISTOFOLINI E; BARZOLA, MATÍAS; ROBERTO D. MARTINO; OTAMENDI J.; A.M. TIBALDI; ARMAS. P.; BENITO MARIA PAULA; CAMILLETTI G; ESCRIBANO F.
Lugar:
PUERTO MADRYN
Reunión:
Congreso; XXI Congreso Geológico Argentino; 2022
Institución organizadora:
UNPSJB AGA
Resumen:
La Sierra de Comechingones, en su extremo sur, expone un basamento cristalino conformado por los complejos litoestratigráficos Achiras y Monte Guazú, que representan la evolución de los sistemas orogénicos Pampeano y Famatiniano. Dichos complejos ígneo-metamórficos polideformados exhiben historias evolutivas contrastadas, evidenciadas en las paragénesis minerales y estructuras de sus unidades litológicas (Otamendi et al. 2014). Separando y afectando de manera diferencial a dichos complejos, se desarrolla la Faja de Cizalla Las Lajas (Otamendi et al. 2014, Cristofolini et al. 2017). El conocimiento geológico de la mencionada faja de cizalla ha tenido un avance importante en los últimos años, siendo esta contribución un aporte al entendimiento de esta y cuyo objetivo es indicar las evidencias que demuestran su continuidad más allá de los límites establecidos hasta la actualidad. La Faja de Cizalla Las Lajas se dispone con rumbo noroeste y con buzamiento del plano general de cizalla de 48º al noreste. Muestra un ancho variable, desarrollando su potencia máxima de 1,5 km en su segmento austral, en tanto que en su segmento norte su potencia se reduce a tabiques de 2,5 m a 50 m. Ésta se extiende por más de 35 km de largo iniciando en la serranía de La Aguada en cercanías a la estancia Boca del Río, en tanto que su límite sur será considerado en esta contribución y reajustado mediante la información geológica ligada al estudio de los cerros Áspero y Sampacho. La faja de cizalla está conformada en su localidad tipo por rocas de la serie milonítica derivadas de protolitos ígneos y metasedimentarios, cuyas paragénesis indican condiciones de medio a bajo grado metamórfico, estables en facies de anfibolita y esquistos verdes. Los últimos asomos de la Sierra de Comechingones comprenden dos pequeñas serranías dispuestas en proximidades al paraje Chañaritos y a la estancia La Colorada, a unos 20 km al sur de la localidad de Achiras. Estos cerros conocidos, como Áspero y Sampacho, comprenden lomadas bajas de entre 150 y 230 m de altura, aflorantes de manera aislada y circundados por sedimentos cuaternarios. El cerro Sampacho se presenta segmentado en dos serranías menores (cerro Sampacho Norte y Sur) separadas por un valle intermontano, cubriendo 0,12 km2 cada una y dispuestas elongadas con su eje mayor en sentido noreste-suroeste (cerro Sampacho Norte) y noroeste-sureste (cerro Sampacho Sur). Por su parte, el cerro Áspero es un pequeño afloramiento de basamento elongado en sentido noroeste-sureste que abarca 0,03 km2. Una particularidad a destacar es que ambos cerros poseen un límite oeste que claramente coincide con la extensión austral de la traza de la falla Las Lajas-Sampacho, la cual, solo para el cerro Áspero, también concuerda con la traza del arroyo Achiras-El Gato. Desde el punto de vista petrológico, el cerro Sampacho se conforma de un dominio de ortogneises granodioríticos-tonalíticos (Cuarzo + Plagioclasa + Feldespato Potásico + Biotita + Muscovita ± Circón ± Epidoto ± Opacos), ortogneises tonalíticos hornbléndicos (Cuarzo + Plagioclasa + Hornblenda ± Biotita ± Titanita ± Circón ± Opacos) y de manera aislada paragneises (Cuarzo + Plagioclasa + Biotita ± Muscovita ± Granate ± Circón ± Opacos) y cuerpos globosos y/o tabulares de granitos y leucogranitos aplopegmatíticos (Cuarzo + Plagioclasa + Feldespato Potásico + Biotita + Muscovita ± Granate ± Turmalina ± Circón ± Apatita). Por su parte, el cerro Áspero está constituido casi íntegramente por aplopegmatitas graníticas (Cuarzo + Plagioclasa + Feldespato Potásico + Biotita + Muscovita ± Circón ± Apatita) y lentes de paragneises (Cuarzo + Plagioclasa + Biotita ± Muscovita ± Granate ± Circón ± Opacos) y mármoles (Calcita + Dolomita + Diópsido ± Forsterita ± Brucita ± Serpentina) muy alterados hidrotermalmente. En todos los casos, las litologías que componen ambos cerros exponen las fábricas y relaciones texturales ígneas/metamórficas originales del basamento casi completamente transformadas, generando un dominio litológico tanto de milonitas como de protomilonitas. De modo general, las milonitas-protomilonitas en los cerros estudiados se exhiben como cuerpos lenticulares a subtabulares, aflorando como bancos lajosos, subangulosos, dispuestos con su eje mayor orientado norte-sur o noreste-suroeste. Frecuentemente muestran tamaño de grano medio a fino y dependiendo del protolito (ortogneis-paragneis-mármol-granito) un color gris-blanquecino hasta ocre. Las milonitas-protomilonitas poseen una textura de flujo milonítico con porfiroclástos inmersos en una matriz (25 % a 70 %) de grano medio a fino (1,4-0,9 mm) y desarrollan una foliación milonítica anastosmosada continua y fina. También, muestran cintas de cuarzo que se curvan alrededor de los porfiroclastos, bandas de cizalla de tipo S-C y C-C?, micas con formas de pez y con bordes desflecados y micropliegues acodados (tipo kink bands). Asimismo, dichas rocas exhiben porfiroclastos monominerales o agregados poliminerales de tamaño medio a grueso (5-3 mm), que dependiendo del protolito pueden ser de plagioclasa, microclino, granate, calcita/dolomita, hornblenda, diópsido y/o forsterita. En todos los casos, los porfiroclastos exponen morfologías de tipo sigma, delta y ocasionalmente de tipo complejas, con desarrollo de colas asimétricas, y, solo para los porfiroclastos de plagioclasa se definen texturas de tipo manto-núcleo. El análisis petrográfico de detalle indica que las asociaciones paragenéticas reconocidas en la matriz de las milonitas-protomilonitas en los cerros Sampacho y Áspero demuestran que dichas rocas fueron estabilizadas en facies de esquistos verdes con coexistencia de Cuarzo-Plagioclasa-Clorita-Muscovita-Sericita-Biotita [milonitas (s. l.) de paragneises y ortogneises] y Calcita-Dolomita-Talco-Flogopita [milonitas (s. l.) de mármoles], acotando a condiciones de metamorfismo de grado bajo para el evento dinámico que dio origen a dichas rocas. El análisis de la estructura interna del basamento que conforman los cerros Sampacho y Áspero indica la presencia dominante, en todas las rocas miloníticas (s. l.), de una estructura planar, anastomosada, fina y localmente apretada, denominada aquí como foliación milonítica. Esta fábrica transpone a las fábricas metamórficas y/o magmáticas de las rocas del basamento, obliterándolas completamente, y se muestra de manera regular como planos de aspecto esquistoso de colores ocres-verdes y grises. Dicha foliación milonítica muestra una orientación regular de rumbo N 354° a N 15° (plano medio estadístico N 4°) y un buzamiento variable entre 52° y 78° al este (valor medio estadístico 62°). Asimismo, se ha reconocido el desarrollo sobre los planos de la foliación milonítica de una lineación de estiramiento mineral, indicada por el crecimiento de escamas elongadas de Chl-Ms-Bt y agregados de cuarzo y/o calcita/dolomita en listones finos. La lineación se orienta entre N 69º y N 112º (valor máximo estadístico N 94°), con una inmersión variable entre 42° y 66°. El análisis conjunto de la disposición espacial de las lineaciones sumada a indicadores de rotación, indican que la cinemática general de la cizalla que dio origen a las rocas y fábricas miloníticas presentes en las zonas estudiadas se caracteriza por ser dominantemente inversa con una localizada componente sinestral, donde el transporte tectónico del techo es siempre al oeste. Se puede precisar que solo en el cerro Sampacho se reconocen con claridad pliegues de primer orden de tipo asimétrico, que presentan formas de S-Z con asimetría variable. Estos muestran planos axiales orientados noroeste y buzamiento suave al este (valor medio estadístico de Rbo/Bz: N 357°/18° E), cuyos ejes se disponen con una dirección sur-sureste dominante e inmersión moderada entre 12° y 32° en igual sentido. Las longitudes de onda de estos pliegues varían entre 1 a 10 m. También se reconocen, en los núcleos de los pliegues mayores, pliegues intrafoliares asimétricos a apretados considerados aquí como de segundo orden y cuya escala es centimétrica con longitudes de onda que varían de 3 a 35 cm. Estos pliegues de segundo orden muestran planos y ejes con orientaciones análogas a los pliegues mayores. En conjunto, las estructuras de plegamiento indican una vergencia hacia el oeste. El análisis estructural y petrológico desarrollado en los cerros Sampacho y Áspero indica que las rocas del basamento han sido afectadas por un proceso metamórfico-deformacional de tipo dinámico, que ha obliterado las características originales de las rocas y generado una serie de rocas miloníticas y fábricas afines a procesos de deformación por cizalla no coaxial. El análisis de las asociaciones paragenéticas y las condiciones metamórficas deducidas para las milonitas estudiadas es claramente coincidente con aquellas definidas para litologías similares descriptas en la sección austral de la faja de cizalla. Asimismo, el tipo de estructuras (foliaciones, lineaciones y pliegues), sus orientaciones y la cinemática son similares a las indicadas a lo largo de toda la Faja de Cizalla Las Lajas (ver Cristofolini et al. 2017 y citas en este). El análisis de los protolitos de las milonitas (s. l.) de dichas serranías indica que éstos son análogos a las rocas definidas como complejo Monte Guazú y dada la ubicación espacial de los cerros estudiados, se deduce que el basamento en estudio es parte del mencionado complejo. La información detallada en esta contribución demuestra que la Faja de Cizalla Las Lajas y sus productos lito-estructurales pueden ser extendidos por ~22 km más al sur de lo que se conocía hasta el momento, formando los últimos asomos de basamento expuesto en los cerros Áspero y Sampacho, donde forman parte del bloque del techo de la mencionada faja de cizalla. Todo esto lleva a revalidar que la mencionada faja de cizalla tiene una extensión que supera los 42 km de largo, y ha sido una importante zona de nucleación de las deformaciones regionales a lo largo del Paleozoico. Esto último induce a pensar que la misma tuvo su origen vinculado al acortamiento cortical generalizado que tuvo lugar entre el Ordovícico (¿medio?) y el Devónico en el borde del Gondwana Occidental (Martino 2003, Cristofolini et al. 2017), relacionado directamente con el evento orogénico de escala continental (orógeno Famatiniano) que culmina con la colisión del terreno Cuyania/Precordillera.