El par cómico de Estrepsíades y Sócrates en la Comedia Nubes de Aristófanes

SCHERE, MARÍA JIMENA

Argos

Asociación Argentina de Estudios Clásicos

Lugar: Bahía Blanca; Año: 2009 p. 203 - 218

0325-4194

El trabajo se propone analizar las características del par cómico de Estrepsíades y Sócrates en la comedia Nubes, rastrear sus antecedentes en la tradición literaria y establecer las innovaciones del comediógrafo.    La existencia del par cómico aristofánico -entendido como dos personajes opuestos y complementarios- puede remontarse a la tradición homérica, a la dupla del tonto y el astuto representada por Odiseo y el Cíclope. Si bien Beltrametti (2000) sitúa el origen del par cómico en los mitos de las metamorfosis, que tienen a Zeus como protagonista privilegiado, creemos que el antecedente mítico central del par cómico aristofánico corresponde a la dupla del canto IX de Odisea. Este modelo fundacional homérico sufre transformaciones en la fábula y en la poesía yámbica, que serán retomadas por Aristófanes. En la fábula y el yambo -que utiliza la fábula como recurso cómico para atacar a los enemigos del poeta- el par cómico del tonto y el astuto pierde su halo legendario. La comedia adopta esta desmitificación de sus géneros antecesores y, al igual que el yambo, asigna un referente externo al polo ridiculizado del par cómico. En suma, el par cómico de la comedia mantiene sus raíces en el modelo homérico, retoma elementos de la fábula y del yambo, pero adopta una nueva línea de blancos cómicos dominantes que la distinguen de los géneros antecesores: en la comedia el blanco está representado por sujetos que ocupan algún lugar socialmente destacado. En el caso particular de Nubes, se produce una significativa transformación del tópico del tonto y el astuto: Aristófanes invierte el foco de la burla y coloca como blanco privilegiado ya no la figura del tonto Estrepsíades, sino del astuto Sócrates. Esta inversión del modelo está en sintonía con la elección de los blancos centrales en la obra del comediógrafo: el objeto de bula ya no es la figura del más débil, el tonto e ignorante campesino, sino del personaje superior en saber e inteligencia.