TAFONOMÍA DE RESTOS ÓSEOS ACUMULADOS POR EL ÁGUILA MORA (GERANOAETUS MELANOLEUCUS, ACCIPITRIFORMES) Y SU APLICACIÓN EN CONTEXTOS ARQUEOLÓGICOS DE LOS ANDES CENTRALES DE ARGENTINA

JOSÉ MANUEL LÓPEZ; FERNANDO J. FERNÁNDEZ; HORACIO CHIAVAZZA ; GUSTAVO NEME; LUCIANO DE SANTIS

Ushuaia

Congreso; IV Congreso Nacional de Zooarqueología Argentina; 2016

Centro Austral de Investigaciones Científicas, CADIC-CONICET

En los últimos veinte años en la Argentina, se han consolidado varias líneas de investigación en relación al estudio de micromamíferos procedentes de sitios arqueológicos. En este marco, los análisis tafonómicos han cumplido un papel esencial para explicar los procesos y agentes intervinientes en la formación de dichos conjuntos óseos. Esto se ve reflejado en la cantidad de depredadores que han sido evaluados tafonómicamente en Argentina. Sin embargo, en un buena parte de los análisis zooarqueológicos de micromamíferos no se tiene en cuenta esta información generada y se asume que la lechuza de campanario (Tyto alba) es el agente causal de los depósitos. Si bien esto es adecuado para sitios tipo cueva o refugio rocoso, hay otros depredadores, como se prueba en este trabajo, pueden intervenir en la formación de los conjuntos de micromamíferos bajo roca. En este trabajo se estudian las características tafonómicas de dos conjuntos óseos de micromamíferos generados por la depredación del águila mora (Geranoaetus melanoleucus, Accipitriformes) en dos áreas de los Andes centrales de Argentina. El águila mora es una rapaz diurna de gran tamaño (1670-3170g.), generalista y oportunista, que se alimenta principalmente de micromamíferos y secundariamente de aves, reptiles e insectos. Presenta una amplia distribución en Sudamérica, habita en multiplicidad de ambientes y realiza sus nidos en salientes rocosas y árboles. Los modelos tafonómicos generados mediante los conjuntos actuales se comparan con los conjuntos óseos de micromamíferos recuperados de dos sitios arqueológicos ubicados en las mismas áreas. Uno en el noroeste de Mendoza (Rincón de los Helados; 32º37´ S, 69º6´ O; 2900 m) y otro en sudoeste de Mendoza (Arroyo Malo 3; 34º51´S, 69º53´ O; 2160 m). En resumen, el análisis tafonómico señaló bajas abundancias relativas promedio, sumado a un elevado porcentaje de elementos fracturados tanto craneales como poscraneales y una alta proporción de elementos óseos diagnósticos afectados por corrosión digestiva. Se destaca que los patrones de abundancias relativas, fracturas y grados de corrosión coinciden entre los conjuntos actuales y arqueológicos, lo que sugeriría que el águila mora fue el agente acumulador de los conjuntos óseos de Rincón de los Helados y Arroyo Malo 3.