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Los factores dietarios juegan un rol fundamental en el desarrollo de varias patologías, incluyendo las enfermedades cardiovasculares y otras enfermedades metabólicas, como hipertensión, aterosclerosis, dislipidemias, diabetes tipo 2 y síndrome metabólico. El ajo (Allium sativum L.) y la cebolla (Allium cepa L.) son alimentos ampliamente utilizados en todo el mundo como especies. En los últimos tiempos se han realizado diferentes estudios donde se ha documentado la acción cardioprotectora de las aliáceas mediada por su efecto sobre la disminución de la concentración de lípidos plasmáticos, disminución de la presión arterial, como antioxidante, inhibidor de la agregación plaquetaria, y disminución de la glucemia. A pesar de los numerosos estudios que describen el efecto de las aliáceas en la prevención de las enfermedades cardiovasculares, la mayoría de ellos son inconsistentes y controversiales, debido a diferencias y deficiencias en la metodología utilizada. Sin embargo, la mayoría de los efectos benéficos son atribuibles al alto contenido de compuestos azufrados, que se producen cuando la enzima alinasa actúa sobre los precursores del aroma, como cisteinsulfóxido, en el caso de la cebolla, y aliína en el ajo, cuando la hortaliza es cortada o triturada. La administración crónica de fructosa a ratas es capaz de inducir resistencia a la insulina, hiperinsulinemia, e hipertensión y este modelo experimental (FFR) ha demostrado en trabajos previos su utilidad para el estudio de la interacción de los factores que configuran el síndrome metabólico. El objetivo de este estudio fue evaluar el efecto antioxidante del ajo y la cebolla en un modelo experimental de síndrome metabólico en ratas, utilizando como control del efecto antioxidante, el tempol (4-hidroxi-2,2,6,6-tetrametilpiperidina-1-oxil), una sustancia con capacidad barredora de anión superóxido. MATERIALES Y METODOS Diseño experimental Para la obtención del modelo patológico (FFR) se administró una solución de fructosa al 10% (p/v) en el agua de bebida. Se utilizaron extractos acuosos de ajo y de cebolla, los cuales fueron administrados diariamente por vía intraesofágica durante las últimas 8 semanas de tratamiento. El tempol, utilizado como control del efecto antioxidante, se administró en el agua de bebida en una concentración 1mM durante las últimas 8 semanas de tratamiento. Se distribuyeron en forma aleatoria 40 ratas de 30 días de edad y peso uniforme, en 5 grupos (n=8 en cada uno): I. Control (C): ratas con libre acceso al agua; II. FFR: administración de fructosa al 10% durante todo el protocolo; III. FFR + Ajo (G): administración de fructosa al 10% durante todo el protocolo y extractos acuosos de ajo en dosis de 150 mg/Kg/día durante las últimas 8 semanas de tratamiento; IV. FFR + Cebolla (O): idem III y extractos acuosos de cebolla en dosis de 400 mg/Kg/día durante las últimas 8 semanas de tratamiento, y V. FFR + Tempol: idem III, adicionada de tempol 1 mM las últimas 8 semanas. Las muestras de sangre fueron extraídas por punción de la bifurcación de la arteria aorta, después de un ayuno de 12 horas, al final del periodo experimental. Se determinaron los niveles plasmáticos de glucosa y triglicéridos por método colorimétrico enzimático utilizando kits comerciales (GTLab, Buenos Aires, Argentina). La presión arterial sistólica (PAS) fue monitoreada indirectamente a lo largo del protocolo, por el método pletismográfico en la cola de la rata (Grass Instruments Co., Quincy, MA, USA). Como marcadores de estrés oxidativo se determinó la actividad de la NAD(P)H-oxidasa en arteria aorta, mediante quimioluminiscencia con por incubación con lucigenina y sustancias reactivas al ácido tiobarbitúrico (TBARS) en plasma de acuerdo al método descrito por Lapenna et al.2001. Este método se basa en la reacción del malondialdehido (MDA), un producto de lipoperoxidación del plasma con el ácido tiobarbitúrico (TBA). El resultado de esta reacción es la formación de un cromóforo de color rosado, cuya concentración se mide por espectrofotometría. Los datos se expresaron como promedio ± error estándar de la media (s.e.m.). Los datos fueron procesados por ANOVA y post-test de Newman-Keuls. Se estableció un nivel de significancia de p<0,05. RESULTADOS Las ratas FFR mostraron un aumento significativo de los niveles plasmáticos de glucosa y triglicéridos (p<0,001) comparado con el grupo control. Los grupos no revirtieron significativamente estas dos variables metabólicas. El peso de los animales del grupo FFR aumentó significativamente pero este aumento fue revertido por administración de extractos de ajo (p<0,01) y de cebolla (p<0,01). Los niveles de PAS en el grupo FFR aumentó significativamente (p<0,001 v C), la administración de ajo, cebolla y tempol fueron capaces de revertir significativamente este aumento (p<0,05 v FFR). Se observó que el grupo FFR presentó un aumento significativo de actividad de la NAD(P)H-oxidasa en aorta comparado con el grupo control (p<0,001). Sólo la administración de ajo y tempol redujeron significativamente la actividad de esta enzima (p<0,01 y p<0,05 respectivamente) comparada con el grupo FFR. No se encontraron diferencias entre el grupo tratado con cebolla y el grupo FFR. Los niveles plasmáticos de TBARS fueron significativamente más altos en el grupo FFR comparados con el grupo C (p<0,05). Tanto la administración de extractos de ajo como de cebolla fueron capaces de revertir significativamente este aumento (p<0,05 y p<0,01 respectivamente). Una respuesta similar se obtuvo en el grupo al cual se le administró tempol (p<0,05). CONCLUSIONES En este estudio demostramos que la administración de extractos acuosos de ajo y de cebolla tiene la capacidad de revertir el incremento en la PAS y el estrés oxidativo en el modelo FFR. Su mecanismo de acción estaría relacionado con el alto contenido en antioxidantes, atribuible principalmente al contenido de compuestos azufrados. Encontramos que tanto la administración crónica de ajo como de cebolla fueron capaces de revertir el aumento de la presión sistólica en el modelo experimental patológico, posiblemente asociada a los efectos antioxidantes, aumentando la biodisponibilidad de óxido nítrico (NO), un potente vasodilatador. Respecto de la actividad de NAD(P)H oxidasa, observamos que solamente el ajo y el tempol fueron capaces de revertir el aumento de su actividad, pero no así la administración de cebolla. Esta discordancia podría explicarse en diferencias descriptas entre variedades de cebolla por otros autores. La capacidad de actuar como antioxidantes, barriendo las ROS generadas a nivel vascular, puede ser el mecanismo involucrado en la reversión de la peroxidación lipídica plasmática en los grupos tratados con ajo, cebolla y tempol, evidenciado por una disminución en los niveles de TBARS en plasma. Estos resultados apoyan la hipótesis de que el consumo de aliáceas podría tener significación clínica en la prevención primaria del síndrome metabólico, aportando nuevas evidencias sobre los beneficios de los nutracéuticos en las enfermedades cardiovasculares.

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