Arte, publicidad y propaganda: el Telereclam de la Plaza Rivadavia (Bahía Blanca, 1954-1961)

LÓPEZ PASCUAL, JULIANA

Bahía Blanca

Congreso; XI Jornadas de Historia Moderna y Contemporánea; 2021

Departamento de Humanidades/UNS

En noviembre de 1954, bajo la gestión del intendente municipal Norberto Arecco, comenzó la construcción del ?Telereclam? en la plaza Rivadavia de Bahía Blanca. Con fines declaradamente publicitarios y a cargo de un concesionario, se trató de un artefacto de hormigón de 15 metros de altura ubicado en la intersección de las calles Alsina y Chiclana; en él podrían proyectarse diversos soportes visuales como fotografías o films mediante la utilización de grandes pantallas y altoparlantes. A pesar de la impronta moderna de su formas y objetivos, este elemento suscitó diversas tensiones que condujeron, en junio de 1961, a que el propio Municipio ordenara la demolición del ?monumento a la alpargata?. La reconstrucción de la breve historia de esta intervención en un espacio central de la ciudad vuelve evidente que tanto su erección como su destrucción se hallaron intrínsecamente atravesadas por la complejidad social, política y cultural de la época, lo que implicó que su materialidad sostuviera debates simbólicos de largo alcance.A partir de la revisión de documentos oficiales y material de prensa, intentaremos aportar una hipótesis interpretativa acerca de las relaciones entre las artes y lo político, prestando particular atención al papel desempeñado por el Estado. De una parte, afirmamos que el diseño de este objeto y su emplazamiento en la plaza central hizo visible el contraste entre planteos visuales y arquitectónicos diversos, llevando a la vía pública parte de los debates que hasta entonces circulaban de manera más restringida en las instancias específicas de la plástica. Por otra parte, el objetivo publicitario de la construcción desplazaba los sentidos conmemorativos tradicionalmente asignados a la ornamentación de espacios verdes porque se hacía eco de las transformaciones que se operaban en el estatuto de lo visual a partir de su reproductibilidad mecánica y teletransmitida, especialmente a raíz de la expansión de las estrategias de promoción del consumo, a la vez que hacía foco en las divergencias entre representaciones de lo público y lo privado. Finalmente, la vinculación explícita entre el proyecto espacial publicitario y la gestión local del gobierno peronista superpuso una nueva capa de sentido al ?Telereclam? que, luego de septiembre de 1955, fue observado como unamanifestación celebratoria del justicialismo depuesto, exponiendo claramente su lectura a través del prisma ideológico peronismo/antiperonismo.