Postsecularismo y esfera pública: una discusión desde Habermas y Joas a la luz de los requisitos democráticos actuales

FONTI, DIEGO

Tucumán

Congreso; XX Congreso Nacional de Filosofía de la AFRA; 2023

AFRA

La comprensión secular del mundo en Nietzsche y Weber ha sido determinante para la filosofía y las ciencias sociales. Forma parte de la matriz de nuestras discusiones actuales sobre legitimaciones institucionales, normatividades legales e institucionalizaciones públicas. Cuestiones como los contenidos educativos o las decisiones bioéticamente relevantes son ejemplos paradigmáticos del devenir de cierto laicismo secular consolidado. Desde esta comprensión, la constelación conceptual en torno a la noción de secularización parece haberse impuesto no sólo como evidencia sino también como una cuasi ley del devenir histórico. Esta posición ha tenido un efecto importante a la hora de determinar los límites y legitimidad de las afirmaciones con base religiosa en los debates públicos. Pero esta posición y sus derivas tiene problemas no sólo normativos sino también empíricos: la supuesta secularización y privatización de lo religioso no parecen confirmables en ámbitos fuera de Europa; implican un problema respecto de la libertad de creencias y del derecho de configurar la propia existencia expresivamente a la luz de tales creencias; y más allá de algunas estadísticas sobre el incremento de la visión arreligiosa del mundo, también se confirma un incremento de sectores y denominaciones notablemente militantes de las confesiones religiosas. Para comprender este problema y actualizar sus efectos para la esfera pública, conviene retomar los análisis de Habermas y Joas respecto del postsecularismo. A partir de la confrontación entre ambos, propongo indagar tanto en el plano descriptivo la persistencia y características de lo religioso, como en el plano normativo el tipo de condiciones para las manifestaciones de lo religioso, en particular a la luz de la perspectiva latinoamericana. Esta perspectiva, encarnada particularmente en los planteos liberacionistas y sus epígonos, significó un diálogo notable del cristianismo con las tradiciones críticas, asumiendo así algunos rasgos constitutivos de la perspectiva laica, aunque al mismo tiempo sosteniendo sus planteos con núcleos de sentido de clara ascendencia religiosa. Una revisión actualizada de esta interacción advierte que también esta perspectiva ha perdido peso frente al incremento de los sectores mencionados. Es así que se habilita una segunda confrontación con Joas, esta vez respecto de los criterios centrales que proponían las teorías liberacionistas latinoamericanas, para estudiar los límites que impidieron su progresiva expansión y consolidación. Las posiciones de Joas respecto del modelo pragmatista de subjetividad, del origen de los Derechos Humanos y del universalismo moral proveen de núcleos referenciales sólidos para una interacción que permita un mutuo aprendizaje superador.