Desmesura populista: los derechos en disputa

MERCEDES MARÍA BARROS

Buenos Aires

Congreso; II Congreso de Pensamiento Político Latinoamericano. Integración Latinoamericana: Estado, hegemonía y populismo.; 2012

Centro de Investigaciones en Pensamiento Político Latinoamericano y Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo

Mi presentación girará en torno del devenir de la lucha y demanda por los derechos humanos en la Argentina democrática. Particularmente mi intención es detenerme en la estrecha relación de articulación que se ha dado entre los derechos humanos y el Kirchnerismo, buscando cuestionar ciertas maneras de entender esa relación que han prevalecido en el ámbito académico y periodístico en general, e intentado aportar así una nueva miradaque puedahacer más inteligible esa particular articulación. El Kichnerismocomo fenómeno político de movilización y participación popular ha sido objeto de diversos predicados que lo colocan en el terreno del desborde, la desmesura, la desobediencia.En este terreno escabroso, el fenómeno en cuestión cobra sentido en torno a las nociones de manipulación, confrontacióny demagogia. De esta forma, en estas lecturas del presente se ponen en juego y se re significan viejas y reiteradas miradas de un pasado recienteque surgieron para echar luz sobre aquel primer peronismo del 45 y sus más variadas implicancias políticas. Nuevamente, la demagogia del líder,la ingenuidad de algunosmuchos, la racionalidad instrumental de otros se anudan para explicar esta renovada movilización social y participación política. Hoy, como ayer, el apasionamiento y la adhesión fanatizada de sus seguidores son producto del engaño y del oportunismo del líder político, quien en su afán por conseguir y preservar el poder cae en la desmesura confrontativa, desobedece reglas y desbordalas instituciones. Es justamente, en el marco de este carácter excesivo y desmesurado y sus implicancias manipulatorias e instrumentalistas que comúnmente se ha entendido la política de derechos humanos del gobierno de Néstor Kirchner y de su sucesora.Aquí, en mi presentación también me situaré en ese exceso que ha caracterizado al discurso kirchnerista, pero no para proveer una descripción peyorativa más de esta formación discursiva, sino más bien para mostrar su carácter novedoso y heterogéneo respecto a viejos conceptos y sentidos establecidos alrededor de los derechos humanos que contribuyeron a dar forma a la vida política en la nueva democracia