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¿Cuáles son los motivos que nos llevan a compartir noticias con nuestros amigos virtuales? El interés que nos despiertan ciertos acontecimientos, ¿incide en nuestra propensión a consumir todo tipo de informaciones o solo aquella con la que coincidimos? ¿En qué medida nuestro involucramiento (engagement) con la información noticiosa incide en las prácticas periodísticas y en los criterios editoriales de noticiabilidad a la hora de decidir qué contenidos destacar en lugar de otros? Estas inquietudes encuentran en el contexto argentino de la pandemia por Covid-19 un escenario elocuente, por tratarse de una amenaza global que conjuga dos dimensiones del riesgo: la posibilidad objetiva de contraer la enfermedad y la percepción individual ?dimensión subjetiva? de la amenaza de estar expuesto al virus. De allí que los altos niveles de temor e incertidumbre generados durante el año 2020 otorgaran a los medios informativos un rol central, dada la necesidad de orientación de la ciudadanía para guiarse en un escenario de riesgo nunca antes experimentado. Este aumento del consumo de noticias se conjuga con el uso intensivo de redes sociales virtuales, que mostraron una evolución voluble del intercambio de contenidos en línea con diferentes motivaciones: mantenerse informados, conversar sobre política, saber más acerca de amigos y familiares o matar el aburrimiento; en ese orden decreciente. En este trabajo nos interesa indagar sobre el sentido que tomó el flujo informativo en el marco de la pandemia. Es decir, si la atención que los principales medios digitales argentinos prestaron a la Covid-19 durante el año 2020 influye en la propensión a compartir noticias (news sharing) por parte de los usuarios de redes sociales o, por el contrario, si el consumo de información en línea incide en los criterios editoriales de noticiabilidad y, más específicamente, en la jerarquización de ciertos temas en la portada de las homes. De esta problematización se deriva una inquietud relativa a los factores que motivan el consumo y circulación de información en línea. Esto es, el peso de las consideraciones ideológicas, la atención hacia un determinado asunto y la reputación del medio en las decisiones de compartir contenidos con otros pares conectados. En función de los objetivos propuestos realizamos un análisis de contenido sobre las noticias de portada de las homes (n=3820) de los medios digitales más leídos de la Argentina: Infobae, Clarín, La Nación y Página/12, entre el 20 de marzo ?fecha de inicio del período de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) en el país? y el 31 de diciembre de 2020. Complementariamente, cotejamos el nivel de involucramiento con esas mismas noticias por parte de los usuarios de las redes sociales Twitter, Facebook, Instagram, YouTube y Pinterest, a partir de otra base de datos elaborada por el interdisciplinary Lab for Computational Social Science (iLCSS) de la Universidad de Maryland. El cotejo de ambas dimensiones de análisis posibilitó la construcción de un modelo probabilístico que buscó determinar si existe influencia entre la jerarquización mediática de ciertos asuntos y el consumo informativo de estos en redes y, de existir, cuál es el sentido de dicha influencia. Los resultados a los que arribamos evidencian que la Covid-19 acaparó la atención de los medios analizados de manera significativa, con un 47% del espacio de las portadas de Clarín, Infobae, La Nación y Página/12 dedicadas al tema; aun cuando el nivel de relevancia del problema ha sido dispar a lo largo del período. Los resultados también nos permiten establecer los niveles de news sharing que son atribuibles a una ?tasa natural? de la jerarquización en home de cada diario. Asimismo, pudimos constatar que, del total del corpus, al menos un 16% de las notas quedaron ubicadas en la home al día siguiente de haber sido publicadas y compartidas en redes sociales, lo que confirma la incidencia que el consumo y la difusión en redes (news sharing) tiene sobre los criterios de los editores y las prácticas periodísticas. Más concretamente, mostramos que un aumento en el total de compartidos (total shared) en las distintas plataformas, cuando la noticia no fue featured en el home, aumenta la probabilidad de que dicha noticia sea posteriormente jerarquizada en los espacios de mayor visibilidad de esos medios. Finalmente, detectamos un efecto diferencial del acto de compartir entre los diferentes medios, comparativamente mayor en la estructuración de las agendas de Infobae y de Página/12 y menor en La Nación y Clarín. El resultado permite hipotetizar que mientras Página/12 e Infobae son más sensibles a las reacciones de sus lectores a la hora de construir sus portadas digitales, Clarín y La Nación conservan un rol de gatekeeping centralizado, lo cual les permite estructurar sus agendas con mayor independencia de las reacciones de los usuarios por estar exentos, en mayor medida, de las influencia que supone el consumo de noticias en línea.

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