Introducción a la ecología del fuego

DEFOSSÉ G.E.; URRETAVIZCAYA M.F.

Fuego en los Ecosistemas Argentinos

Ediciones INTA

Lugar: Santiago del Estero, Argentina; Año: 2003; p. 17 - 45

El fuego es también uno de los factores ambientales que ha estado presente desde siempre en nuestro planeta, actuando como una fuerza evolutiva de gran significación. Desde el punto de vista ecológico, el fuego puede ser considerado como un disturbio que no es particularmente ni positivo ni negativo. Con su acción, si bien se destruye la biomasa vegetal, se crean a su vez espacios abiertos, claros o "gaps" de distintos tamaños donde pueden establecerse luego nuevos individuos que van a dar paso a las diversas etapas sucesionales que permiten la evolución de las comunidades. El fuego ha sido entonces un factor que ha modelado la estructura de numerosos ecosistemas terrestres, permitiendo mantener su diversidad y estabilidad. Evidencias de capas de carbón en sedimentos lacustres confirman que el fuego fue ecológicamente importante en distintos ecosistemas desde tiempos remotos. Los fenómenos de vulcanismo y fundamentalmente rayos por tormentas eléctricas, han sido desde siempre las causas principales que provocaron la ignición de estos fuegos naturales. El fuego es entonces un disturbio que depende de varios factores y consideraciones, y en el que cada vez tienen más importancia las acciones humanas. Es así como el fuego puede ser necesario desde el punto de vista ecológico en algunas comunidades, para acelerar alguna etapa de la sucesión, para permitir la germinación y el desarrollo de nuevos propágalos, o para eliminar la competencia intra o interespecífica. También desde el punto de vista económico, ya sea a través de quemas prescriptas para mejorar la calidad nutricional de pasturas para el ganado o simplemente simulando un fuego natural para bajar la carga de combustible y disminuir así el riesgo de que cuando se produzca un incendio no tenga éste características de comportamiento extremo. Por otro lado, puede también tener consecuencias catastróficas cuando afecta áreas de ecosistemas con sobrada presión antrópica que interfiere y limita su recuperación natural, así como construcciones, sembradíos, plantaciones o pone en riesgo la seguridad y la vida de las personas. De allí la importancia de incorporar el tema de las acciones, el comportamiento y el pensamiento humano con relación al fuego como disturbio no sólo en los ecosistemas naturales sino también en los modificados por acción antrópica. El desafío está entonces en investigar y comprender el rol que el fuego tiene en cada comunidad y profundizar los programas de predicción y prevención con el fin de realizar las tareas necesarias de manejo de combustibles que permitan reducir los riesgos futuros.