INVESTIGADORES
LONDON Silvia
congresos y reuniones científicas
Título:
Medio ambiente y desarrollo sostenible: incorporación de metodologías participativas para su análisis
Autor/es:
MARIA MARIA IBAÑEZ, BELEN BERTONI, LONDON SILVIA
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Jornada; XIX Jornadas de Epistemología de las Ciencias Económicas,; 2013
Institución organizadora:
UBA
Resumen:
El medio ambiente, donde el hombre desarrolla sus actividades y básicamente donde se desenvuelve la historia de la humanidad, ha padecido (y padece) numerosos cambios que ponen en riesgo su sustentabilidad. La economía como disciplina ha considerado al medio ambiente de diversos modos a lo largo de su historia. A partir de 1970, dadas las visibles consecuencias del uso indiscriminado de los recursos naturales y de un futuro comprometido, los economistas neoclásicos comenzaron a preocuparse por el medio que los rodeaba. Los primeros modelos marcan el nacimiento de la economía ambiental (EA), que es considerada una rama de la economía neoclásica, por lo que conserva sus principios y elementos de análisis: el sistema de precios, la eficiencia y la idea de optimización para analizar el intercambio entre consumidores y productores. Se basa en un análisis de equilibrio para hallar la mejor asignación posible dados los recursos disponibles (Londoño, 2006). El concepto de equilibrio utilizado proviene de la física, y representa una situación de reposo en la que fuerzas contrapuestas se anulan entre si (ejemplo, el equilibrio de mercado). En este caso, cualquier perturbación del equilibrio que no modifique las estructuras del sistema producirá cambios momentáneos, y las fuerzas inherentes harán que el mismo retorne al equilibrio. (Tohmé y London, 1998). Las críticas más importantes a este enfoque y su propuesta de valuación pueden resumirse en lo siguiente: por su intento de incorporar a la naturaleza dentro del mercado sólo son ?valorables? aquellos recursos que son útiles para el agente económico; la posibilidad de crecimiento sin límites que plantea; su concepción respecto a la posibilidad de sustitución de recursos naturales por aquellos elaborados por el hombre (Fontela, 1997); la omisión de las generaciones futuras (Naredo, 1997); y por último, se cuestiona el tipo de análisis que realiza a la hora de asumir sus políticas. Se asume que los parámetros que definen los sistemas y las relaciones entre las variables no cambian (esto no se produce en los sistemas biológicos y humanos), y que las relaciones funcionales se mantienen constantes durante la predicción (Ramos y Martín, 2002). En base a las críticas surge la economía ecológica (EE) como campo disciplinar de análisis. (Heredia, 2011). Se fundamenta que la economía se desarrolla en el medio ambiente; la economía es un subsistema dentro de un sistema que cuyo límite es la biósfera (Ballestero, 2008). Se presenta una visión más radical de pensamiento, agregando al análisis de la relación economía ? ambiente elementos de las ciencias naturales (física, biología, ecología) y basándose fundamentalmente en la termodinámica no lineal y sus leyes (Ballestero, 2008). De esta forma el análisis se aleja del concepto de equilibrio de la economía ambiental (neoclásica), e incorpora nociones de irreversibilidad, estados de desequilibrio (o no-equilibrio), perturbaciones permanentes, autoorganización, sensibilidad y estados meta-estables (London, 2006). Así, la principal diferencia con la economía ambiental es que considera al proceso de producción como un sistema abierto- complejo totalmente conectado al medio ambiente. En este contexto, el objetivo de esta nota es analizar la pertinencia y utilidad de las metodologías participativas en el estudio del Desarrollo Sustentable , en el marco de la Economía Ecológica.