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El principal fertilizante utilizado en la producción de soja para obtener mejores rendimientos es el superfosfato simple, SPS, también llamado arrancador, porque se aplica en el momento de la siembra. El mismo aporta los requerimientos del cultivo en S (azufre), Ca (calcio) y P (fósforo). Este último participa en el crecimiento de las plantas, en el funcionamiento de los nódulos y la actividad de las bacterias en el proceso de FBN, tanto por procesos directos (actividad nodular) e indirectos (crecimiento de la planta). En condiciones de baja oferta de P se limita la formación de nódulos, la fijación del N y la relación de biomasa nódulo:raíz. El objetivo de este trabajo fue evaluar la respuesta de crecimiento temprano del cultivo de soja a la inoculación con Pseudomonas fluorescens y co-inoculación con Bradyrhizobium japonicum en función de la capacidad de incorporación de P asimilable (Pa) y no asimilable (Pna). Se desarrollaron experimentos en 4 replicas, en potes (300 cc) con una mezcla de perlita/vermiculita y 5 semillas/pote, en cámaras de crecimiento (16 h luz a 28ºC/8 h oscuridad a 20ºC, HR 80%) y fueron irrigados con solución de buffer de fosfatos (Pa/Pna) por 21 días. La inoculación con Pseudomonas fue más efectiva sobre las variables morfofisiológicas analizadas cuando el P no estaba disponible. El parámetro más beneficiado fue el peso fresco de raíz y la relación raíz/parte aérea. Dicha inoculación y la co-inoculación con B. japonicum mejoro significativamente la relación clorofila a/b, el contenido de carotenos y el de P, siendo éste mayor en ambas situaciones (Pa/Pna). La co-inoculación no afectó la nodulación cuando el P no estaba disponible. Estos tratamientos al promover el crecimiento temprano y prolongar la estabilidad del aparato fotosintético, sin alterar la nodulación en soja, podrían incrementar la acumulación de materia seca en sus productos a cosecha.

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