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A partir de la gran crisis energética de 1973, y las siguientes manifestaciones ambientales en todo el planeta, se instaló la discusión sobre la necesidad de tomar medidas que frenen la contaminación y el calentamiento global. Dos temas sensibles que traspasan fronteras, divisiones de clase y de culturas. Ello implica promover el uso racional de la energía (URE) y eficiencia energética (EE). Aunque todos los países deberían sentirse involucrados y tomar las medidas que correspondan, los habitantes de los países en desarrollo están más vulnerables porque se necesita crecer sin el consumo de energía con que crecen los demás países, por dos razones: porque la energía es de alto costo, y porque su uso impacta sobre el ambiente. El uso racional de la energía y la utilización de energías no convencionales en los edificios, particularmente en el sector vivienda, son temas que han sido abordados más por la bibliografía que por las prácticas concretas. Este trabajo, se plantea como objetivo principal concienciar sobre la necesidad de uso racional de la energía. Como objetivos específicos apunta a demostrar posibilidades de diseño y construcción de viviendas ambientalmente eficientes y económicamente competitivas; divulgar experiencias de diseño sustentable en Córdoba; y definir indicadores de diseño, construcción y uso de viviendas. Se plantean dos caminos para alcanzar URE y EE en las viviendas: la primera es tomar medidas compulsivas, vinculadas a sistemas tecnológicos costosos, poco disponibles. El segundo es obtener un eficiente diseño energético, estableciendo pautas para el adecuado diseño bioclimatico, con medidas conservacionistas, mas que complejas metodologías de calculo. Implantación en el terreno aprovechando la topografía, adecuada orientación, uso de la energía solar como recurso para calefacción mediante sistemas pasivos y para calentamiento de agua de uso sanitario, control de la radiación solar como protección para verano, ventilación cruzada para disminución de temperatura interior, y aislación de las envolventes laterales y superior, son algunas de las recomendaciones alcanzadas. Las resultados establecen que se logra un ahorro de 21,25 % en calefacción por ganancia energética solar directa. La inversión en la vivienda aumenta en 12,68 % en relación al costo de una construcción tradicional en similares condiciones de: localización, superficie proyectada y técnicas constructivas tradicionales. Se comprueba que el sobrecosto inicial es recuperado en corto plazo En conclusión, dos metas se establecen en el plano general y en el particular: - la necesidad de considerar la utilización racional de la energía como una auténtica fuente de recursos energéticos - El uso racional de la energía, como fuente energética, es fuertemente dependiente de las decisiones de los consumidores. Se hace necesario entonces establecer metas concertadas para el aumento de la eficiencia en el consumo de energía y esto será posible en la medida que: a.- Se conozca de manera suficientemente aproximada el flujo de energía para cada sector en particular. b.- Se establezcan los potenciales de ahorro energético sobre la base de diversas hipótesis de inversión en función conservacionista. c.- Se cuente con instrumentos de promoción adecuados, tales como: ventajas crediticias, impositivas, tarifarias, etc.; para estimular las inversiones para la racionalización de la energía.

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