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En el presente trabajo se presenta un sistema biohíbrido, basado en nanofibras poliméricas de alcohol polivinílico (PVA) y bacterias empleadas en procesos de biorremediación para la remoción de contaminantes ambientales. Se prepararon nanofibras de PVA mediante electrospinning, con ácido cítrico como agente reticulante. La solución fue electrohilada mediante el empleo de un dispositivo de diseño propio (1), obteniendo como resultado membranas de PVA resistentes a hidrólisis. Los aislamientos bacterianos Bacillus toyonensis SFC 5001E y Acinetobacter guillouiae SFC 500-1A (2; 3; 4), fueron asociados a estas membranas mediante un procedimiento propio en vías de patentamiento (INPI N°: 20055663)(Figura 1). La presencia de las bacterias en la matriz polimérica se evidenció mediante microscopía de fuerza atómica (AFM). La capacidad de remediación de las membranas biohíbridas fue evaluada empleando inicialmente un medio de remoción sintético-adicionado con 5 mg/L de Cr(VI) y concentraciones variables de fenol- y finalmente un efluente natural de curtiembre. Se ensayaron cuatro tratamientos: membranas control y membranas biohíbridas (CBM y BM, respectivamente) y medio de cultivo líquido de control y un inóculo bacteriano en cultivo líquido-sin asociar a membranas- (CLC y LC, respectivamente). Todos los tratamientos se incubaron a 28°C con agitación a 75 rpm y se tomaron muestras líquidas después de 24 h de incubación para determinar niveles de Cr(VI) y fenol. Las membranas biohíbridas fueron recicladas y reutilizadas bajo cinco ciclos de remoción sucesivos de 24 h cada uno. Después de cada ciclo, las membranas biohíbridas se colocaron en medio de remoción estéril adicionado con 5 mg/L de Cr(VI) y 200 mg/L de fenol. Se cuantificaron los contaminantes al fin de cada ciclo de remoción y se evaluó el recuento total de células viables de los agentes de biorremediación (UFC/g). El contenido de fenol se determinó según Wagner y Nicell (5) y el contenido de Cr(VI) se determinó mediante el método APHAAWWA (6) y mediante espectrometría de absorción atómica (AAS). Las membranas biohíbridas promovieron una reducción de hasta 2,5 mg/L de cromo hexavalente y hasta 200 mg/L de fenol después de 24 h de tratamiento. En el efluente se observó una remoción de hasta un 46% del Cr(VI) y de la totalidad del fenol, desde concentraciones iniciales de 7 y 305 mg/L, respectivamente. Las membranas resultaron resistentes a hidrólisis, reutilizables y eficaces durante más de 5 ciclos de reutilización. La viabilidad de los microorganismos se mantuvo después del almacenamiento a largo plazo de las membranas a 4°C.

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