INVESTIGADORES
FINQUELIEVICH Susana
congresos y reuniones científicas
Título:
LA CIUDAD ELECTRÓNICA Y EL PLANEAMIENTO MUNICIPAL
Autor/es:
SUSANA FINQUELIEVICH
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Conferencia; Primera Conferencia Anual de la Asociacion Argentina de Estudios Canadienses; 1997
Institución organizadora:
Asociacion Argentina de Estudios Canadienses (ASAEC)
Resumen:
¿Qué efectos ejercen los cambios tecnológicos sobre el planeamiento municipal y sobre la misma forma urbana? ¿De qué manera reconfiguran el funcionamiento interno de las instituciones urbanas? ¿Qué procesos deben llevar éstas a cabo para permanecer tecnológicamente actualizadas, de modo de poder responder a las demandas siempre nuevas y crecientes de la población, del sector privado, de otros niveles de gobierno?   La evolución acelerada de las telecomunicaciones están transformando las maneras en que las personas trabajan, viven y se relacionan socialmente. Los planificadores urbanos se ven enfrentados al desafío de administrar verdaderas ciudades electrónicas, en las que las comunicaciones entre los organismos de gobierno, en el interior de éstos y entre las municipalidades y los ciudadanos se hacen cada vez más fluidas.   Cuando se considera que a estas redes se añaden las que se establecen entre los habitantes de la ciudad, conformando comunidades virtuales que pueden transformarse en interlocutores válidos ante los gobiernos locales, se comprende que se está ante un fenómeno de altísima complejidad. La “ciudad electrónica” no sólo está reconfigurando el tejido urbano y la forma en que los ciudadanos utilizan el espacio, sino que también ejerce una influencia sobre las fronteras de lo que constituye la economía urbana, la definición de las redes sociales y las formas de gobierno local.   La consecuencia es que los gobiernos locales se ven obligados a permanecer actualizados en cuanto a las herramientas tecnológicas que utilizan para su gestión interna y externa, la planificación y la gestión urbana, a fin de poder cumplir sus tareas con la rapidez y la eficacia que demandan actualmente los ciudadanos, las empresas, los otros niveles de gobierno y la sociedad en general.   En este artículo se desarrolla un estudio sobre la Estrategia y Plan de Tecnología Informática de la Municipalidad de la Ciudad de Toronto, adoptado en febrero de 1994. Una evaluación desarrollada previamente por todos los departamentos de la Municipalidad, y facilitada por una consultora externa[1], había extraído la conclusión de que los sistemas de información de la Municipalidad se estaba quedando rápidamente atrasados con respecto a la necesidad de la organización de desarrollar sus funciones con eficacia y velocidad y de satisfacer las nuevas demandas de los ciudadanos. En consecuencia, se propuso un programa global de inversión en informática, que incluía siete proyectos de alcance urbano, dieciocho iniciativas departamentales de la misma Municipalidad y la re-ingeniería de la División de Sistemas de Computación e Informática (CISD). Este proyecto fue aprobado por el Consejo de la Ciudad (City Council), asumiendo que la financiación de las iniciativas individuales dependería de los resultados de futuros estudios, más detallados, de costo/beneficio.    En este trabajo se recorre el estado actual de la aplicación de tecnología informática en la Municipalidad de la Ciudad de Toronto (en adelante: MCT), se describen los objetivos de la organización y se efectúan algunas breves recomendaciones sobre el uso de informática en las instituciones municipales y su actualización, que pueden adaptarse a las necesidades de las grandes ciudades argentinas.   [1]Este estudio fue descripto en el libro de Susana Finquelievich (con la colaboración de Jorge Karol y Graciela Kisilevsky) “¿Ciberciudades? Informática y gestión urbana”, editado por el Instituto Gino Germani y el Ciclo Básico Común de la Universidad de Buenos Aires en noviembre de 1996, donde se comparan las estrategias de informatización de las municipalidades de Toronto y Buenos Aires. La información con respecto a Toronto se recogió en un viaje en enero de 1994..