INVESTIGADORES
FINQUELIEVICH Susana
congresos y reuniones científicas
Título:
Del café de barrio a las computadoras. Las redes electrónicas comunitarias
Autor/es:
SUSANA FINQUELIEVICH
Lugar:
Concepción
Reunión:
Congreso; XXII Congreso de la asociación Latinoamericana de Sociología; 1999
Institución organizadora:
Asociación Latinoamericana de Sociología
Resumen:
Una serie de municipios argentinos comparte sus experiencias e intercambia información mediante una red electrónica. Los pacientes de un centro de salud mental se relacionan en un foro electrónico para “ensayar” las relaciones sociales antes de practicarlas en el “mundo real”. Una asociación destinada a cambiar las formas tradicionales de mercado mediante el trueque de bienes y servicios entre sus socios se presenta en el ciberespacio por medio de una página web. Una red de profesionales europeos de salud mental aspira a la creación de la “Sociedad de la Inspiración”, como versión humanizada de la Sociedad de la Información. La comunidad judía de Buenos Aires mantiene su cohesión, conforma su vida social y cultural, dispara debates políticos y se comunica con las de otros países mediante redes electrónicas. ¿Qué tienen en común estas experiencias? La respuesta más obvia parecería ser: el uso de comunicación mediatizada por computadoras. Pero la verdadera respuesta va más allá: todos estos grupos están incrementando sus potencialidades mediante la CMC. Pueden extraer la información que necesitan de las redes informáticas, darse a conocer, informar a la comunidad en general sobre sus objetivos y formas de trabajo, ganar respaldo y sobre todo, reposicionarse en las estructuras de poder locales. En cierta forma, lo que tienen en común es su actuación en redes horizontales, en una suerte de recuperación de las formas tradicionales de la democracia directa y de la vida comunitaria. Según Robert Markley (1996), autor de "Realidades virtuales y sus descontentos", el ciberespacio no puede separarse nunca de las políticas de representación, precisamente porque es la proyección de los conflictos de clase, género y raza a los que la tecnología a la vez engloba y busca borrar. La tecnología no escapa a la política, así como tampoco lo hacen las nuevas formas de comunicación derivadas de ella.