INVESTIGADORES
GOLOVANEVSKY Laura Andrea
congresos y reuniones científicas
Título:
¿Desocupados, informales o trabajadores? Una revisión sobre el devenir del concepto economía popular a partir del estudio de movimientos sociales en Jujuy.
Autor/es:
FLORENCIA NIEVA; LAURA GOLOVANEVSKY
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Seminario; VII Seminario Internacional Desigualdad y Movilidad Social en América Latina; 2023
Resumen:
En el trabajo analizamos, a partir de la bibliografía disponible, la raíz y las implicancias de dos categorías que se desarrollaron para explicar el surgimiento y expansión de sectores que realizan actividades económicas por fuera del mercado laboral usualmente denominado formal: informalidad y economía popular. Ambas nociones reflejan diferentes maneras de aproximarse a la comprensión de un fenómeno muy visible pero difícil de conceptualizar. Son también disímiles en la perspectiva que adoptan, en los matices que pueden captar y en su capacidad explicativa.En las sociedades modernas el trabajo se constituyó en la principal fuente de recursos económicos del hogar, especialmente entre los sectores más pobres, que dependen de sus ingresos laborales para la subsistencia cotidiana. Pero el cambio de modelo del último cuarto del siglo XX en Argentina profundizó la existencia de una categoría de empleos a los que se dio en llamar informales: de baja calidad, con escasa protección social, bajos ingresos y reducida productividad, en búsqueda de recursos para sobrevivir. En este escenario, la categoría de informalidad emerge como una forma de comprender aquello que para muchos era, en un principio, incomprensible. La necesidad de supervivencia, propia de países de menor grado de desarrollo, lleva a que vastos sectores de población que resultan excluidos del acceso a empleos asalariados bien remunerados deban recurrir a diferentes estrategias de búsqueda de ingresos para sobrevivir. Y en esta búsqueda crean en muchos casos su propio puesto de trabajo. Se genera en este contexto un amplio grupo de trabajadores desocupados con trayectoria de luchas sindicales e historias laborales que favorecieron su organización en colectivos entonces conocidos como movimiento de desocupados o movimiento piquetero, cuyo nombre proviene de los piquetes/cortes de ruta o de las principales avenidas que se dieron a lo largo y ancho del país y cuyas demandas, aunque variadas, se centraban en trabajo digno, subsidios al desempleo, alimentos y otras. El movimiento piquetero se ha constituido históricamente como uno de los más importantes de Argentina y se ha desempeñado en esta arena sociopolítica como uno de los principales agentes en la resistencia a las consecuencias sociales de las reformas neoliberales y en la lucha por la reincorporación de los sectores populares al empleo formal en el que parte de ellos se desempeñaba antes de dichas reformas.Entre el 2003 y el 2015 se vivieron transformaciones en las políticas públicas y la praxis económica, priorizando estrategias tendientes a la transferencia de recursos hacia los grupos más desfavorecidos. Las luchas por recursos y derechos de los movimientos sociales se hicieron presentes durante toda la década y en 2011, tratando de interpretar a estos nuevos actores, irrumpe una categoría que venía tomando fuerza desde hace años: la economía popular. Tanto en el caso de los movimientos de desocupados como de las organizaciones de la economía popular los une y afianza la reinvención de su trabajo a partir de los recursos disponibles, el piquete, la olla popular, el pasado de precarización y el horizonte plagado de desafíos impuestos por una nueva crisis cíclica en el país, pero con la confianza en poder lograr tierra, techo y trabajo, de poder lograr un buen vivir.La categoría informalidad, con un desarrollo teórico mucho más extenso, y gran cantidad de trabajo empírico por parte de quienes investigan la temática, no parece tener este rasgo de apropiación identitaria, de organización política, que se observa tan claramente en la economía popular. La categoría informalidad no logra consolidar una definición que abarque la heterogeneidad de situaciones que aspira a comprender, mientras que la economía popular cuenta con la legitimación que le brinda el ser definida por los propios actores que la ejercen, lo que favorecería un mayor alcance explicativo, aunque el alcance preciso de la categoría también resulta esquivo.