INVESTIGADORES
BALDI German
congresos y reuniones científicas
Título:
Intensificación productiva en el Gran Chaco: Lecciones del resto del mundo
Autor/es:
BALDI, GERMÁN; MERCAU, JORGE L; JOBBÁGY, ESTEBAN G.
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Congreso; Congreso Tecnológico CREA; 2011
Institución organizadora:
CREA
Resumen:
Comprender los desafíos productivos y ambientales del Gran Chaco Sudamericano (Chaco) cobra urgencia ante su veloz transformación. Un camino complementario al de la observación, ensayo y modelización local de distintos usos y manejos sobre los resultados productivos e impactos ambientales lo constituye la exploración de regiones ambientalmente similares que han estado sujetas a contextos sociales, económicos y tecnológicos contrastantes. Mediante bases de datos climáticas y topográficas identificamos sistemas subtropicales con lluvias estivales similares a nuestro Chaco en Asia, África, Norteamérica y Australia.   Hoy, la integración de imágenes satelitales, datos cartográficos, estadísticas subnacionales, y archivos fotográficos del mundo facilita enormemente la caracterización regional de la situación social y económica, del estado y productividad de la vegetación natural, del uso del suelo, y de la producción agrícola y ganadera. Esta información se encuentra disponible online mejorando día a día su calidad, facilidad de captura y posterior manejo. Su integración puede resolverse cuantitativamente mediante herramientas especializadas, como los sistemas de información geográfica, o cualitativamente mediante la elaboración de narraciones comparativas. Comparado con las otras regiones, los campos naturales del Chaco presentaron los menores signos de alteración de la cobertura boscosa (alta fracción leñosa, baja ocurrencia de suelo desnudo) y tuvieron las mayores y más estables tasas de producción de biomasa. Esta condición positiva del Chaco se relacionaría con su baja densidad poblacional (7.3 hab*km-2), su aislamiento geográfico (especialmente en Paraguay y Bolivia), su breve historia de uso (<200 años), y su capacidad de acceso a tecnología. Con un 16% de área cultivada, el Chaco está muy por debajo de Asia (74%), pero por encima de las otras regiones, siendo la única que muestra una expansión creciente en la actualidad (1.6% anual en Argentina). Los paisajes agrícolas del Chaco sostienen rendimientos tan elevados como los de Asia y Norteamérica (~3000 kg*Ha-1*año-1) consumiendo significativamente menos insumos (riego, fertilizantes). África y Australia tienen productividades agrícolas un ~40% menores en secano. La presión poblacional y los sistemas de explotación implementados han generado las mayores diferencias encontradas entre el Chaco y las otras regiones. Si bien en todas ellas existen paisajes dominados por vegetación leñosa y con buena cobertura del suelo, en Asia y Australia predominan áreas de campo natural con una denudación del suelo casi completa. Fundada en una concepción pastoril europea, la producción ganadera en Australia (inicialmente lanar y luego vacuna) fue acompañada por una rápida e indiscriminada remoción de la vegetación leñosa. Sus paisajes hoy presentan un aspecto más semejante a un semidesierto que al de bosques que aún se preservan en los pocos sectores protegidos. Comparativamente la productividad de los campos naturales de Australia es la más baja e inestable y, aún habiendo reemplazado árboles por pastos, la región sostiene una carga animal inferior a la del Chaco (0.09 vs. 0.15 Eq*Ha-1). En tanto, la región Asiática, localizada en la planicies del Indo y el Ganges, presenta una historia de uso de más de 4000 años, con menos de 25% de campo natural remanente. La región sostiene la mayor densidad (0.62 Eq*Ha-1) y número absoluto de herbívoros domésticos (~180.000.000 búfalos, vacas, ovejas, y cabras). Su productividad se sustenta hoy con grandes cantidades de fertilizantes (140 kg N*Ha-1) y riego (57% del área) subsidiados por el estado, y sufre un importante deterioro de acuíferos (menor cantidad y calidad de agua) y de suelos (salinización). La gran transformación del Chaco se funda en el reemplazo de ganadería de cría extensiva basada exclusivamente en vegetación natural de monte hacia sistemas agrícola/ganaderos de gran escala y tecnificación. Las comparaciones realizadas muestran que ese avance no presentaría limitaciones climáticas; no obstante, cambios en la coyuntura económica (que afectasen a la rentabilidad de la producción) podrían distender este proceso. El caso asiático sugiere que la productividad podría ser sostenida por décadas o siglos, pero alerta sobre la creciente aplicación de subsidios que podría requerirse para ello. Este caso ilustra también que la expansión agrícola es compatible con una ganadería basada en residuos agrícolas y cultivo de forrajes. La productividad asiática, estimulada por la altísima demanda interna, se ha sostenido sacrificando la integridad de recursos naturales. Aprender sobre los errores y aciertos de estas regiones puede ser muy valioso para el Chaco si pretendemos sostener los buenos niveles productivos y la baja necesidad de insumos de sus campos naturales y cultivados. La vegetación natural del Chaco es la mejor conservada de todos los sistemas estudiados, presentando una oportunidad para aprovechar sus servicios (control de erosión/inundación/salinización, oferta de madera de calidad) y para generar proyectos de uso del territorio que compatibilicen su conservación, su uso productivo y su coexistencia con áreas cultivadas. http://www.aacrea.org.ar/index.php/comunicado-de-prensa/410-saber-hoy-que-haremos-manana-lo-mejor-del-congreso-tecnologico-crea-2011-tercera-parte