INVESTIGADORES
JUAREZ Laura Susana
capítulos de libros
Título:
“Imaginario modernista y exotismo maravilloso. Sobre los modos anómalos de lo fantástico en Roberto Arlt”
Autor/es:
JUÁREZ,LAURA
Libro:
en Miriam Chiani (editora), De realismos y fantásticos
Editorial:
unlp
Referencias:
Año: 2006; p. 1 - 34
Resumen:
Si bien es sabida la preeminencia de las ficciones fantásticas en la literatura argentina y en la producción del Río de La Plata, el caso de Roberto Arlt pone en evidencia una zona dentro de esa producción que no ha sido suficientemente analizada ni como corpus individual ni en relación a los contextos de su emergencia. Porque si es a mediados de la década del treinta y en los primeros cuarenta que en las letras argentinas se discute cómo narrar[1], y las definiciones en este marco tienden a la consolidación de lo fantástico, en oposición al realismo, como una de las poéticas que empiezan a imponerse para la escritura de ficción[2], los relatos que Roberto Arlt escribe en ese período deben situarse en ese espacio y en ese conjunto de problemáticas. Entre el conjunto de nuevos rasgos, géneros y procedimientos que aparecen en la literatura de Arlt por ese entonces, los modos de lo fantástico y lo maravilloso que recorren su cuentística son centrales para considerar un giro de su textualidad en los años treinta y las formas en que su obra se redefine, modifica y reestructura en ese momento. En este sentido, un libro que señala un quiebre entre dos espacios bien marcados y, podría decirse, dos estéticas, en la producción de Arlt es El jorobadito, publicado en 1933 pero que reúne obras previas. Allí se inscriben cuentos como “Los hombres fieras”, afines a las formas expresivas de sus novelas, y la serie de ficciones sobre el noviazgo y el matrimonio burgués, que también tiene su correlato tanto en las notas que Arlt publicaba en El Mundo por esas fechas, como en El amor brujo, su última novela. Lo curioso es que El jorobadito incluye también por primera vez en libro “El Traje del fantasma” y “La luna roja”, dos narraciones cercanas a lo fantástico que abren nuevas formas expresivas en su literatura. En la década del treinta y los primeros cuarenta, por lo demás, Arlt publica en las páginas de El Hogar, y Mundo Argentino un número considerable de cuentos que se distancian acabadamente de los formas de la representación realista y se aproximan a los modos de lo fantástico[3], muchos de los cuales son recopilados cuando en 1941 edita casi el corpus completo de sus relatos de tema africano, en El criador de gorilas. En el trabajo consideramos, en principio, cómo lo fantástico arltiano que se inscribe en muchas de estas ficciones finales de Arlt se construye reiteradamente en relación con un saber literario que proviene del modernismo y del imaginario decadente e indagamos de qué manera es a partir de los tópicos reescritos y retomados de esa estética que los cuentos se organizan, en un movimiento anacrónico que los acerca a relatos fantásticos de la literatura argentina bastante anteriores, como los de Leopoldo Lugones. Examinamos, también, el modo en que los rasgos decadentistas y modernistas se cruzan y conviven en los años treinta con otros elementos también presentes que remiten a las constantes más típicas de la ficción arltiana de la década del veinte: en este cruce de tendencias Arlt reestructura su obra a la vez que toma distancia y cuestiona algunas de las formas cristalizadas en la tradición literaria del modernismo-decadentismo. Asimismo, y teniendo en cuenta que insistentemente es el escenario africano el ámbito donde se inscriben estos relatos, y que lo fantástico se desarrolla preferentemente en un espacio exótico y alejado, analizaremos cómo la conjunción de exotismo y fantástico genera cierto tipo de narraciones que se acercan en muchos casos al orden de lo maravilloso. De esta manera, si en el campo literario se estaban imponiendo, con Borges, Bioy Casares y Silvina Ocampo, los textos de aventuras, las narraciones policiales y los relatos fantásticos, como el tipo de ficciones que abrían un lugar en la literatura argentina y los cuentos de Arlt deben relacionarse y remiten, indiscutiblemente, a ese marco, el anacronismo que aparece en muchos de sus textos y la apertura hacia lo maravilloso, hacen que su obra siempre se inscriba en los contextos de su emergencia de un modo conflictivo y problemático. Porque Arlt no sólo se aleja de la tradición modernista por la redefinición de sus rasgos, también su cuentos fantásticos resultan anómalos según los parámetros y realizaciones que en los treinta y cuarenta empezaban a consolidarse para ese tipo de formas de la narración, bastante alejados, por cierto de los tópicos modernistas o de algún acercamiento a lo maravilloso. [1] Para esta cuestión consúltese: Gramuglio, María Teresa. "Posiciones, transformaciones y debates en la literatura" en Crisis económica, avance del Estado e incertidumbre política (1930-1943), tomo VII de la Nueva Historia Argentina dirigido por Alejandro Cataruzza, Buenos Aires, Sudamericana, 2001. [2] Véase: Gramuglio, María Teresa. "Posiciones, transformaciones y debates en la literatura", Op. Cit.. [3] Rosemary Jackson se refiere a “modos” de lo fantástico en el capítulo de su libro donde hace un deslinde terminológico y un acercamiento teórico sobre la cuestión. Véase, a este respecto: “El modo fantástico”, en Jackson, Rosemary. Fantasy: literatura y subversión, Buenos Aires, Catálogos editora, 1986.