INVESTIGADORES
VILLAR Diego
capítulos de libros
Título:
La jefatura entre los chané del noroeste argentino
Autor/es:
VILLAR, DIEGO; FEDERICO BOSSERT
Libro:
Liderazgo, representatividad y control social en el Gran Chaco
Editorial:
Eudene - Universidad Nacional del Nordeste
Referencias:
Lugar: Corrientes; Año: 2008; p. 275 - 284
Resumen:
Resumen. La interpretación canónica de las jefaturas indígenas en las tierras bajas ha documentado sociedades más o menos igualitarias cuyos líderes poseían escaso poder excepto en la guerra. Para consolidar su difusa autoridad, debían contentarse con la poliginia, la manipulación de las alianzas, los convites y –en el caso de los grupos de origen tupí-guaraní– la explotación de las relaciones avunculares. Entre los chiriguano y los chané los caciques, llamados mburuvicha o kampita, eran varones distinguidos por su coraje, su saber y su elocuencia; debían calmar los roces internos, administrar justicia, coordinar la celebración de las fiestas y fundamentalmente comandar la guerra. Más allá de estas atribuciones, sin embargo, la literatura enfatiza que el pueblo tomaba sus propias decisiones a través de reuniones y asambleas, y que el cacique sólo podía hacerse respetar predicando mediante el ejemplo, pues carecía de coerción. Si bien el cargo era a veces hereditario, cada sucesor debía merecer día a día su privilegio, ya que de lo contrario era posible destituirlo. Sin embargo, donde la lectura canónica del cacicazgo chané ha visto jefes sin poderes y asambleas democráticas, los datos etnográficos e históricos muestran, por el contrario, poderosas dinastías de dirigentes y jefaturas hereditarias. Mediante el ejemplo de los chané del noroeste argentino, se evidencia que el tradicional modelo explicativo del cacicazgo chané procede de una visión “guaranizante” que no puede aplicarse mecánicamente a la realidad concreta, y se describen etnográfica y etnohistóricamente procesos como la conformación de linajes de prestigio y élites cacicales; las tensiones y conflictos entre los mismos; las ideologías y legitimaciones “aristocráticas” de la jerarquía y la endogamia de rango (“raza”, “endogamia” y “pureza” étnicas); las redes supralocales de circulación de bienes, conocimientos, solidaridades y servicios; el aprovechamiento estratégico de contracciones y aperturas de las redes de alianza; los faccionalismos, adscripciones y divisiones colectivas; las tensiones entre los diversos tipos de autoridad y liderazgo (caciques tradicionales, lenguaraces, nuevas autoridades religiosas, políticas y de representación étnica); las prácticas cacicales de legitimación cotidiana mediante administración de las tierras comunitarias y los títulos de tierras, etc.