INVESTIGADORES
COINTRY Gustavo Roberto
congresos y reuniones científicas
Título:
Novel effects of high doses of olpadronate on cortical bone and mechanism of fracture in young-rat femurs
Autor/es:
GUSTAVO ROBERTO COINTRY; RICARDO FRANCISCO CAPOZZA; MARGARITA META; NÉLIDA MONDELO; ENRIQUE PICCINI; JOSÉ LUIS FERRETTI
Lugar:
Honolulu (Hawaii, USA)
Reunión:
Congreso; XXIX ANNUAL MEETING, American Society for Bone & Mineral Research (ASBMR); 2007
Institución organizadora:
American Society for Bone & Mineral Research (ASBMR).
Resumen:
Se trataron 44 ratas de 5 sem de ambos sexos con dosis altas (45-90 mg/kg/d) de OPD oral (Gador) x 3 meses, contra 16 controles. Se determinaron vBMD, perímetros endo y perióstico (ePM, pPM), área (A) y momento de inercia (MI) corticales (pQCT), y la rigidez (relación carga/deformación) y resistencia femoral a la fractura durante las fases de deformación elástica (reversible, sin microcracks) y plástica (irreversible, acumulación de microcracks; tests de flexión), calculándose la rigidez del material mineralizado (módulo elástico E) y un Indice de Resistencia Osea (BSI = vBMD * MI), que predice la resistencia ósea pero no captura ningún factor microestructural cortical ajeno a la mineralización.  El OPD incrementó ePM, pPM, A y MI correlativamente, pero no vBMD ni E, mejorando la rigidez/resistencia diafisaria durante la fase elástica. La resistencia creció (machos, +38%, p<0.001) principalmente debido a un gran aumento de la proporción de carga soportada durante la fase plástica (machos, +300%, p<0.001). El BSI no predijo la resistencia a la fractura en las ratas tratadas. La mejora del comportamiento elástico reflejaría la mejora anabólica de la geometría diafisaria, independiente de la mineralización y rigidez de la compacta; o sea, fuera del control estructural óseo por el mecanostato. La gran mejora del comportamiento plástico, y la falla del BSI como predictor de resistencia, sugieren un llamativo efecto del OPD sobre algún determinante micro-estructural de la calidad mecánica cortical, independiente de la mineralización (arreglo cristalino, calidad colágena, etc) que afecte el progreso de los cracks en el material duro. Estos efectos directos sobre el mecanismo de producción de las fracturas son desconocidos hasta hoy para cualquier tratamiento osteológico, y podrían explicar por qué los efectos positivos de los bisfosfonatos sobre la DMO (DXA) y la tasa de incidencia de nuevas fracturas no resultan necesariamente correlativos.