INVESTIGADORES
RAJAL Veronica Beatriz
artículos
Título:
Parasitosis intestinales en Argentina: Principales agentes causales encontrados en la población y/o en el ambiente
Autor/es:
MARÍA MERCEDES JUÁREZ; VERÓNICA B. RAJAL
Revista:
REVISTA ARGENTINA DE MICROBIOLOGÃA
Editorial:
ASOCIACION ARGENTINA MICROBIOLOGIA
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2013 vol. 45 p. 191 - 201
ISSN:
0325-7541
Resumen:
Las parasitosis intestinales se encuentran ampliamente distribuidas en el mundo, con
mayor prevalencia en los países en desarrollo. Principalmente afectan a los niños, en los
que además provocan disminución del desarrollo físico y mental, situación que puede
potenciarse enormemente cuando se suma a un estado nutricional defi ciente. La Organización
Mundial de la Salud las considera una de las principales causas de morbilidad,
estrechamente ligada a la pobreza y relacionada con inadecuada higiene personal, incorrecta
manipulación de los alimentos crudos, falta de servicios sanitarios, falta de
provisión de agua potable y contaminación fecal del ambiente.
Algunas enfermedades parasitarias se vinculan con condiciones de transmisión que
existen universalmente, por lo que son cosmopolitas, mientras que otras tienen distribución
geográfi ca variable. En los últimos años, debido a la globalización, el movimiento
de personas de zonas endémicas a regiones no endémicas ha permitido la diseminación
de ciertas parasitosis. Y aunque también infl uyen en la frecuencia de algunas de estas
enfermedades las costumbres de los pueblos, las condiciones ambientales son un factor
determinante para la supervivencia de los parásitos. En nuestro país, debido a la diversidad
de suelos y condiciones climáticas que existen, es posible hallar variedad de agentes
causales de estas parasitosis.
El objetivo de este trabajo fue realizar una revisión bibliográfi ca de los agentes parasitarios
causantes de enfermedades entéricas encontrados en la República Argentina,
tanto en materia fecal de personas como en el ambiente, ya que la contaminación parasitaria
de este último constituye un indicador directo del riesgo de infección por parásitos
intestinales.