INVESTIGADORES
LUDUEÑA Gustavo Andres
congresos y reuniones científicas
Título:
Los misioneros benedictinos a comienzos del siglo XX
Autor/es:
GUSTAVO ANDRÉS LUDUEÑA
Lugar:
San Miguel de Tucumán
Reunión:
Jornada; 1º Congreso de Historia de las Órdenes y Congregaciones Religiosas; 2009
Institución organizadora:
Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino
Resumen:
La actividad misional y la etnográfica ?como también la migratoria? resultaron ser comparables en virtud de un marcado compromiso con el desplazamiento geográfico a regiones que, generalmente, se ubicaban en las antípodas culturales de quienes las emprendían. De este modo, la presencia etnográfica como la religiosa en sitios extraños a quienes las encarnaron reunió ambas empresas en un locus común caracterizado por el encuentro con el Otro. En este sentido, el viaje fue un enlace que, con objeto de conocimiento para unos y conversión religiosa para otros, disparó flujos de personas y saberes a través de latitudes lejanas. Sin embargo, a diferencia de la tarea de los etnógrafos abocados a lograr una inserción socialmente neutra allí donde investigaban, la responsabilidad de los misioneros buscó obtener, por el contrario, un importante grado de involucramiento en las realidades locales. De allí su relación con la construcción social de la ?localidad? (locality). En un estudio reciente, Arjun Appadurai definió a esta última ?como principalmente relacional y contextual, más que como escalar o espacial [?] como una cualidad fenomenológica compleja constituida por una serie de vínculos entre el sentido social de inmediación, las tecnologías de interactividad y la relatividad de los contextos?. Dentro de este cruce analítico entre migración, religión y encuentros sociales con la diferencia en contextos locales, los objetivos de este trabajo consisten en establecer las percepciones de los misioneros europeos de la Orden Benedictina respecto de sus nuevos asentamientos en América, particularmente, en la Argentina, y determinar las actividades que en ellos desarrollaron al momento de su llegada a principios del siglo XX para configurar nuevas localidades. Se mostrará que la migración, en tanto desplazamiento desde el exterior ?predominantemente europeo? y por el interior ?mayormente circunscrito a zonas más o menos aledañas a los sitios de instalación de las misiones?, formó parte constitutiva de la actividad misional de estos religiosos generando encuentros permanentes con los Otros. Veremos que aún cuando misionaron sobre colectivos sociales no indígenas ?contrariamente a los casos que la literatura antropológica ha venido registrando?, una posición europeizada y etnocéntrica abonó visiones que construían un sujeto social oscilante entre el salvajismo y la carencia de una correcta práctica religiosa. En suma, argumentaré que tales actividades formaron parte de un paradigma sustentado en el ministerio sacerdotal sobre poblaciones no siempre próximas geográficamente. Así, migración externa e interna dieron forma a lo que entenderé aquí como un modelo ministerial, el cual se basó tanto en la producción de una presencia como de una localidad de misión. Los efectos directos de este paradigma fueron, por un lado, la tendencia al reordenamiento de un catolicismo vernáculo que ?percibido como rudimentario? debía establecer un habitus católico en la población y, por otro lado, la colaboración con un proyecto moderno de nación pergeñado por la elite gobernante del cual la religión era parte insustituible. Finalmente, se verá que estas consecuencias desplegadas en el marco de un encuentro cultural ?en este caso, misioneros versus criollos? no necesariamente implicaron un ?cambio religioso? como lo atestigua la literatura específica sobre la materia. Para explicitar estas afirmaciones comenzaré, primero, presentando un panorama global de las órdenes y congregaciones del clero regular en la Argentina. Segundo, me detendré en las experiencias de desplazamiento y extrañamiento del Otro características de la situación migratoria y misional. Luego, revisaré las actividades desplegadas por los benedictinos que justificaron su caracterización como misioneros y dieron forma tanto al modelo ministerial como a una localidad de misión. Por último, unas palabras finales intentarán un cierre del trabajo a modo de conclusión.