La codificación y la justicia. Rupturas y continuidades en la normativa sobre los ataques contra la propiedad (2ª mitad del siglo XIX)

MELINA YANGILEVICH

Bariloche

Jornada; XII Jornadas Interescuelas-Departamentos de Historia; 2009

Universidad Nacional del Comahue

El propósito del trabajo consiste en analizar la legislación vigente sobre el delito de ataques contra la propiedad entre mediados del siglo XIX y la sanción del código penal elaborado por Carlos Tejedor (1878) así como su aplicación en la instancia letrada en la provincia de Buenos Aires. La sanción de este texto normativo pareció implicar la consolidación del positivismo jurídico en materia penal. De este modo, se habrían superado las leyes penales que en muchos casos provenían de la etapa colonial e incluso precedentes, fundamentalmente la Séptima Partida. Éstas fueron consideradas arcaicas debido a las penas corporales que prescribían. Por otro lado, el texto de Tejedor pretendió dotar de uniformidad a la dispersión legal existente y que los delitos fueran juzgados con base a ciertos criterios únicos y aplicables en todos los casos. No obstante, en el ámbito de la administración de justicia penal durante la segunda mitad del siglo XIX la sustitución de un marco normativo por otro no se dio de manera automática. Por ello, el análisis planteado procurará establecer rupturas y continuidades en la letra de la ley. No obstante, éste no resulta suficiente si no se indaga cómo ésta era aplicada efectivamente en el ámbito de la administración de justicia. Esta indagación pretende contribuir a establecer en qué medida la cultura jurídica vigente en el periodo colonial siguió en uso en el marco de la administración de justicia criminal. La hipótesis que se pretende comprobar es que los principios jurídicos de la normativa penal de la etapa colonial siguieron vigentes durante la segunda mitad del siglo XIX. Ello por dos razones. En primer lugar porque un conjunto de normas continuaron siendo utilizadas por los jueces letrados en sus sentencias durante el periodo mencionado. En segundo término, porque el mismo código redactado por Tejedor incorporó varios de esos mismos principios. En tal sentido podría sostenerse que el Código Penal implicó tanto una ruptura como una continuidad. Los documentos a utilizar son los textos normativos referidos a los ataques contra la propiedad utilizados durante el siglo XIX en el ámbito de la administración de justicia letrada bonaerense –específicamente en el Departamento Judicial del Sud (Dolores)-, el Código Rural (1865), el Código Penal y un conjunto de procesos penales tramitados en el mencionado tribunal.