Conferencia: Una lectura de De haruspicum responso de Cicerón. Algunas reflexiones en torno a la identidad romana

MARÍA EMILIA CAIRO

Río de Janeiro

Otro; Colóquio Internacional Cícero e a Religiâo Romana; 2017

Universidade Federal do Estado do Rio de Janeiro y Newcastle University

En el año 56 a. C. tiene lugar en las inmediaciones de Roma una serie de omina o prodigios. Alarmado por el suceso y con el fin de averiguar su significado, el senado consulta a los arúspices, quienes emiten un responsum indicando las conductas humanas que han roto la pax deorum y formulando cuatro advertencias sobre el futuro inmediato. Publio Clodio aprovecha la ocasión y afirma en una asamblea que el mensaje divino se refiere a la conducta de Cicerón quien, recientemente llegado del exilio, ha mancillado un lugar consagrado al reconstruir su casa en donde se encontraba un templo de la diosa Libertas. El discurso De haruspicum responso es la respuesta de Cicerón a estos conceptos difundidos por Clodio. El orador se dedica, en primer lugar, a desacreditar dicha interpretación para luego presentar su propia lectura del responsum de los arúspices, consistente en señalar a Clodio como el principal culpable de la ira de los dioses y el artífice de la discordia entre los optimates que los arúspices han denunciado. La argumentación de Cicerón es, en esencia, una invectiva contra Clodio, en la que la enumeración de sus vicios y defectos contribuye a proponerlo como el motivo por el cual se ciernen tan grandes peligros sobre Roma. En este trabajo se examinará el modo en que, a la vez que ataca a su adversario, Cicerón configura en este discurso una identidad romana fundamentada, principalmente, en el ámbito de lo religioso.