INVESTIGADORES
VECCHI Laura Gabriela
congresos y reuniones científicas
Título:
Vinculación entre el canal de acceso a los puertos de Bahía Blanca y el sistema interconectado de canales de marea en relación a las tareas de dragado
Autor/es:
GINSBERG, S.S.; ALIOTTA, S.; VECCHI, L.; MINOR SALVATIERRA, M.
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Congreso; XIV Reunión Argentina de Sedimentología; 2014
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Sedimentología
Resumen:
El
área costera de Bahía Blanca (Sur de la Pcia de Bs. As., Argentina) es un
sistema marino complejo, fuertemente influenciado por la circulación de las
corrientes de marea, las características del fondo marino, la inestabilidad y
transporte de los sedimentos y por la acción del hombre. La zona integra un
estuario urbanizado, el cual se encuentra afectado por numerosas actividades
antropogénicas como actividades de dragado, recreación, pesquería, tráfico
marino, recuperación de tierras, etc. A esto se le suma que, a lo largo de la
costa norte del estuario, se disponen importantes puertos y un pujante parque
industrial, los cuales están en continuo progreso debido al constante
crecimiento de la urbanización. Todo esto impulsa en el ambiente litoral
numerosas transformaciones que se traducen en significativos cambios
geomorfológicos. El estuario de Bahía Blanca (Fig.1), conformado por un sistema
articulado de canales mesomareales con orientación general NO-SE, presenta
cauces de diferentes dimensiones, clasificados como grandes canales, arroyos y
arroyuelos. Estos últimos muestran un patrón fuertemente sinuoso a meandroso,
exhibiendo una más baja sinuosidad a medida que las magnitudes de los canales
aumentan. En general, los más pequeños (arroyos y arroyuelos)
desembocan en los grandes canales y éstos últimos vierten sus aguas en el canal
de navegación o canal Principal. La boca de los canales mayores es una zona
altamente dinámica, con considerable movimiento de sedimentos y cambios
morfológicos asociados, conduciendo muchas veces a la depositación de
materiales y formación de embancamientos. En
los últimos 25 años las tares de profundización del canal de acceso a los
puertos ha perturbado, en mayor o menor
medida, la morfología y sedimentología del sistema estuarial. Así, entre 1989 y
1991 el canal Principal, cuya profundidad original era de 10 m, fue dragado a
13,5 m, mientras que en el año 2013 se llevó a cabo una nueva profundización,
alcanzándose los 15,3 m. En ambos casos, gran parte del material refulado se arrojo
en la zona de la desembocadura de los canales de marea que confluyen en el canal
Principal. Esto trajo
como
consecuencia una significativa alteración de la morfología, no solo del sector
utilizado como vaciadero, sino también de las zonas cercanas a las obras de
dragado. Para una evaluación integral del ambiente debe considerarse que el
canal de acceso a los puertos es la vía de conexión para el intercambio de
flujos entre el sistema de canales de marea interconectados que labran la planicie
sur del estuario y el área oceánica adyacente. Debido a esto, es importante
determinar el patrón de circulación de las corrientes entre los canales de
marea y el canal de navegación del estuario los cuales se encuentran
hidrodinámicamente articulados. Por lo tanto, frente a las nuevas modificación
surgidas por esta última profundización el propósito de la presente
investigación es conocer el esquema de variabilidad del flujo de agua en el
sistema canales de marea interconectados-canal de navegación y así establecer
las características hidrodinámicas entre aquellos canales que se hallan
directamente vinculados con el canal de navegación y han sido fuertemente
perturbados durante las recientes obras de dragado. Para ello se midieron
perfiles de velocidad y dirección de la corriente de marea con un ADCP WH de
600kHz (RDI Inc.) en distintos sectores del canal
Principal
y en algunos canales de marea mayores (Tres Brazas, Cabeza de Buey). El equipo
fue montado en una embarcación y los perfiles se realizaron transversales a los
canales y con una resolución vertical de 0,50 m. La conjunción entre los datos
obtenidos en la presente investigación y estudios anteriores relacionados con
mediciones de corrientes de marea (Ginsberg et al.,
2003; Ginsberg y Perillo, 2004; Ginsberg et al.,
2009; Vecchi et al., 2013),
indican que en los canales la corriente de reflujo domina sobre la costa sur
(90 cm s-1), mientras que la corriente de flujo de
menor velocidad (70 cm s-1) alcanza sus máximos
valores en el veril norte. Examinando la asimetría de marea que presentan se
advierte que la máxima velocidad de la corriente de reflujo es un 15% más
rápida que la de flujo, siendo mayor la duración de esta última. Por lo tanto,
en virtud de estas consideraciones, todas estas medidas indican que la
corriente más fuerte en los grandes canales es en dirección del reflujo, lo que
produce un transporte neto de sedimento hacia la zona externa de los mismos o
sea hacia el canal
de navegación, preponderantemente a través de la costa sur. El modelo de
circulación del flujo de agua en el canal de acceso a los puertos señala que el
ingreso del flujo de agua durante la creciente, comienza a originarse a través
de la costa sur por el fondo del canal, alcanzando los máximos valores de
velocidad (105 cm s-1 en promedio) en
cercanías a este veril. Por el contrario, la corriente de reflujo (con valores
promedio de velocidad máxima de 130 cm s-1)
comienza su escurrimiento hacia la zona externa a través de la costa norte, alcanzando
los valores más altos en cercanías de la misma. Dentro de este marco, se
establece que el sistema interconectado canales de marea-canal de navegación forma
una red hidrodinámicamente vinculada.
Así, la corriente dominante de reflujo dentro de los canales de marea
establece un transporte neto de sedimento hacia el canal principal, el cual es
receptor de los materiales erosionados del interior de los canales. Dichas
condiciones dinámicas fueron perturbadas por las recientes modificaciones
derivadas del último plan de expansión y profundización del canal de
navegación, dado que gran parte del material dragado fue volcado en las bocas
de los canales de marea, sectores adyacentes al canal de navegación. Dicha
descarga provocaría, además de una alteración en la topografía del fondo, un
aumento en la disponibilidad
sedimentaria. Estos materiales, según las condiciones locales del patrón de
flujo, son dispersados sobre el veril sur del canal Principal, en sectores
adyacentes al canal de navegación. De esta manera, el sedimento refulado podría
alterar los procesos físicos del ambiente (erosióndepositación) y perturbar el
balance natural del sistema. Con la realización de futuras mediciones de
corrientes en aquellos sectores más críticos se logrará, no sólo ampliar el
conocimiento hidrosedimentológico y el comportamiento evolutivo de este tipo de
sistemas, sino que además se tendrá la capacidad de predecir el comportamiento
de esta red, lo que proporciona las bases para un efectivo manejo del estuario
desde los aspectos ambientales y económicos.