Estrategias de ataque y defensa en la dinámica predador-presa entre crustáceos y moluscos de Mar del Plata (Argentina).

CLEDÓN, M.; LAITANO, M.V.; FARÍAS, N.E.

Jornada; VII Jornadas Nacionales de Ciencias de Mar 2009; 2009

Existen múltiples trabajos que documentan la interacción predador-presa entre crustáceos y moluscos. En el presente trabajo se estudió el comportamiento, tanto de predación como de defensa, de los representantes más comunes de estos grupos en Mar del Plata: de los cangrejos Platyxanthus crenulatus, Libinia espinosa y Ovalipes trimaculatus y de los moluscos Mesodesma mactroides, Donax hanleyanus, Olivancillaria deshayesiana y Buccinanops monilifer. Se enfrentó a cada predador con las distintas presas por separado y a partir de observaciones directas y de las marcas de predación encontradas en las conchas de los moluscos se definieron los comportamientos de cada especie. P. crenulatus utiliza una combinación de estrategias para atacar moluscos de fondo arenoso. En el caso de los bivalvos, se entierra hasta alcanzarlos y luego los rompe en la zona más débil presionándolos entre ambas pinzas. Muy distinta es la estrategia que presenta con los gasterópodos, con quienes utiliza la quela moledora para remover trozos de la concha y alcanzar los tejidos blandos empezando siempre por el labio de la abertura de la concha. L. espinosa ataca principalmente gasterópodos ya que su estrategia es introducir su fina quela en zonas blandas expuestas y cortar porciones de tejido hasta donde sea posible según la relación entre la quela y la forma del molusco atacado. En este caso, el cangrejo sólo puede atacar cuando la presa se encuentra en superficie. Con respecto a O. trimaculatus, a pesar de ser la especie más agresiva, no se registraron ataques a los moluscos ofrecidos, manteniéndose semienterrado en la arena durante todo el estudio. Las estrategias de defensa también fueron diferentes entre bivalvos y gasterópodos. D. hanleyanus y M. mactroides retraen sus sifones y luego se entierran escapando de sus predadores. Por el contrario, B. monilifer y O. deshayesiana suelen estar semienterrados en la arena y ante una señal aparentemente olfativa salen del sustrato y comienzan a escapar reptando. O. deshayesiana además presenta un segundo comportamiento. Cuando se siente atacado, el individuo se invierte exponiendo su pie extendido. Esto ayudaría a los caracoles a escapar al ser arrastrados por la corriente, dado que habitan ambientes de gran energía.